LETRAS Y ALGO MAS
Para poder interactuar en la comunidad, debes estar conectado,o registrarte.Tu cuenta será activada a la brevedad por un Administrador del Foro que hará llegar la activación a tu correo.,por lo cual ten especial cuidado en no equivocarte al registrar tu email sino no podrás ingresar al foro.
Te esperamos
LETRAS Y ALGO MAS
Para poder interactuar en la comunidad, debes estar conectado,o registrarte.Tu cuenta será activada a la brevedad por un Administrador del Foro que hará llegar la activación a tu correo.,por lo cual ten especial cuidado en no equivocarte al registrar tu email sino no podrás ingresar al foro.
Te esperamos
LETRAS Y ALGO MAS
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

LETRAS Y ALGO MAS

Un espacio diferente , para compartir y crear Registrado en Safe Creative
 
ÍndiceÍndice  PortalPortal  BuscarBuscar  Últimas imágenesÚltimas imágenes  RegistrarseRegistrarse  Conectarse  CONTACTANOS  

 

 OTRO CUENTO DE NAVIDAD

Ir abajo 
AutorMensaje
Xanino
Escritor activo
Escritor activo
Xanino


Femenino
Géminis Perro
Cantidad de envíos : 1247
Fecha de nacimiento : 29/05/1934
Edad : 90
Localización : Madrid - España
Fecha de inscripción : 30/11/2009

RECONOCIMIENTOS
Mención Mención: - a la excelencia en sus comentarios
Mención Mención:
Premios Premios:

OTRO CUENTO DE NAVIDAD Empty
MensajeTema: OTRO CUENTO DE NAVIDAD   OTRO CUENTO DE NAVIDAD Icon_minitimeDom Dic 02, 2012 6:17 am

(Este cuento no lo pongo en "Espacio juvenil" porque creo que es un cuento para mayores o mejor dicho, para todos)
Uploaded with ImageShack.us

OTRO CUENTO DE NAVIDAD
Esto ocurrió en el país de la imaginación, allí donde todo es posible.
Se acercaba la Navidad y el señor tiempo, peinaba su larga melena blanca en la que se envolvía hasta parecer una pelota de lana. El señor Tiempo tenía tres hijas: El día, la hora y la vida. Nunca se separaban una de otra, siempre ocupadas en algún quehacer pero cuando más trabajo tenían era cuando llegaba la Navidad, aunque también, era el momento más divertido porque, las tres, preparaban regalos a los hombres para felicitarles en estas fechas.
Esto sucedió un año, ya muy antiguo, muy antiguo, cuando se encontraban reunidas las tres hermanas pensando en cual podía ser el mejor regalo de las navidades y, por unanimidad, decidieron hacer cada una de ellas una clase de caramelos. Pensaron y pensaron y, al fin, comenzaron a fabricarlos. El día hizo los caramelos de la esperanza con un polvillo de burbujas inventado por ella que envolvió en un papelito de color verde, la hora, los de la felicidad, con mucho azúcar y una pizca de menta que envolvió en un papelito azul y la vida, dudó y dudó antes de decidirse, quería acertar con la clase de su caramelo para que, siempre, todos la recordaran y después de dar vueltas y más vueltas, se le ocurrió una idea. Llamó a su amiga la nieve del invierno y le pidió prestados un montón de copos, vertió en cada uno de ellos una lágrima y los envolvió en un papel dorado y brillante precioso.
Cuando amaneció el día de Navidad, las tres hermanas repartieron por el mundo los caramelos y esperaron los resultados abrigadas entre el largo cabello de su padre el tiempo. Comprobaron como a los niños les gustaban los caramelos envueltos en papel verde porque cuando los ponían en la boca, sentían un picor especial muy divertido que los hacía sentirse muy contentos. Los mayores, preferían los azules porque eran de sabor muy dulce e intenso y les hacían sonreír y la vida, esperó, muy preocupada, el éxito que pudieran tener sus caramelos de papel dorado brillante que contenían una lágrima en un trocito de hielo pero, algo decepcionada vio cómo, esos, nadie los comía sino que iban a parar a una bolsita que toda la gente llevaba colgada de su cuello y cuando los ponían en su boca, sus ojos se llenaban de una luz especial que les dibujaba una triste sonrisa en los labios.
Al terminar la Navidad, su padre, el tiempo, les preguntó a sus hijas, el día, la hora y la vida si a los hombres les habían gustado sus regalos. Las tres coincidieron en decir que sí y cuando el padre tiempo quiso saber cuál de ellos había tenido menos éxito, no dudaron un momento en decir:
- Los de papel dorado brillante. Excepto los ancianos, casi todos los guardaban, sin probarlos, en una bolsita que llevan colgada de su cuello.
- ¿Y de qué están hechos esos caramelos? – preguntó el padre tiempo extrañado.
- De hielo y lágrimas – respondió compungida la vida y, un poco triste, dijo: - Quería saber si estos podían gustarle a los hombres pero… no ha sido así.
Entonces el padre tiempo le dijo muy serio:
- No te preocupes, esos caramelos son los que los hombres conservan en su bolsa durante más tiempo y a medida que pasan por delante de mí, son los más probados porque son aquello que los hace más fuertes. De hielo y lágrimas está hecha la verdad, eso es lo auténtico, la esperanza y la felicidad duran sólo un momento.
La vida, el día y la hora, se quedaron pensativas mientras contemplaban desde la ventana del primer piso del cielo, el paso de la humanidad. Entonces pudieron ver cómo, todos sin excepción, probaban las tres clases de caramelos pero, así como los de la esperanza y la felicidad se agotaban rápidamente, los de papel dorado brillante hechos de hielo y lágrimas, llenaban las bolsas que pendían de sus cuellos. Pero, al observarlos atentamente, vieron que, antes de comerlos, les añadían unas gotas de un líquido que contenía un frasquito que cada cual, guardaba en su bolsillo.
Extrañadas las tres hermanas, preguntaron a su padre el tiempo.
- ¿Y por qué los humanos le añaden esas gotas? Parece que así les gustan más. ¿Qué contiene ese frasquito?
El padre tiempo, respondió muy serio:
- Es algo que se llama aceptación y que, los hombres, deben agregar para poder comer esos caramelos con gusto. Cada uno de ellos, cuando viene a este mundo, un ángel del cielo les ofrece un frasco lleno a rebosar, ellos, luego, lo tienen que administrar según vayan comiendo los caramelos con los que tú les has querido obsequiar, querida hija – le dijo a la vida mientras la acariciaba dulcemente.
Las tres hijas del tiempo, se acurrucaron junto a su padre estudiando aquellas palabras y descansaron felices. En la próxima Navidad, deberían fabricar más caramelos pero cada una de ellas pensaba como endulzarlos para que, así, les gustaran un poco más a los hombres. Con este pensamiento, el día, la hora y la vida, se durmieron entre los brazos de su padre el señor Tiempo.– MAGDA.






Volver arriba Ir abajo
http://loscuentosdemagda.blogspot.com
Invitado
Invitado




OTRO CUENTO DE NAVIDAD Empty
MensajeTema: Re: OTRO CUENTO DE NAVIDAD   OTRO CUENTO DE NAVIDAD Icon_minitimeLun Dic 03, 2012 10:36 pm

Excelente cuento Magda. Y debo coincidir contigo que este cuento es más para adultos (o quienes creemos serlo) que para niños. Siempre es una experiencia muy agradable y vivificante leerte. Saludos afectuosos,
José
Volver arriba Ir abajo
 
OTRO CUENTO DE NAVIDAD
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» CUENTO DE NAVIDAD
» Otro cuento para niños; Ana.
» UN CUENTO DE NAVIDAD (A MODO DE FELICITACION NAVIDEÑA)
» Una Carta de Navidad
» REGALO DE NAVIDAD

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
LETRAS Y ALGO MAS :: NARRATIVA :: Textos (literarios, Científicos,Periodísticos, etc.)-
Cambiar a: