EL DIAGNÓSTICO
El doctor Carlos Alberto Medina estuvo revisando el resultado de los análisis que le entregaron del laboratorio, se negaba a creer lo que veía, se le notaba abrumado, ¿Cómo pudo haber pasado aquello? Dios, ¿Cómo le iba a explicar a Isabel aquella desgracia?
Isabel, ajena a lo que se avecinaba, seguía trabajando en Quetzalcóatl, si bien hacía días que notaba cierta mejoría en su salud no dejaba de inquietarle el silencio del doctor Medina, hacía dos semanas que le había tomado muestras de sangre para mandar a examinar y aun no sabía nada...
Isabel -dijo Rubí, una compañera de trabajo- te hablan por teléfono, dice que es de parte del doctor Medina.
-Gracias Rubí, enseguida tomo la llamada.
¿Hola?
¿Isabel? soy el doctor Medina ¿Cómo estás?
Un poco mejor, gracias, hace días que espero me diga el resultado de los análisis...
De eso precisamente quiero hablarte, pero es necesario que vengas a la clínica...
¿Pasa algo malo doctor?
¿Cuano puedes venir? necesito que hablemos personalmente...
Mañana es mi día libre, iré a primera hora.
Está bien Isabel, te espero entonces.
A Isabel se le hizo interminable el día y más larga la noche, algo en la voz del doctor Medina la había preocupado, sentía que algo malo pasaba pero el doctor no se lo había querido decir por teléfono, además, si todo estuviera bien se lo habría dicho, si le había pedido que fuera a verlo a la clínica era porque algo pasaba...
Al día siguiente, apenas abrieron la clínica, Isabel se presentó a ver al doctor Medina, éste se veía demacrado, ojeroso, apenas había podido dormir un poco pensando en el resultado de los análisis.
Isabel -dijo el doctor- siéntate por favor, vamos a hablar...
Doctor, por favor dígame lo que sea, la vida me ha enseñado a ser fuerte y a afrontar lo que sea...
Creéme Isabel que quisiera que hubiera un error en el resultado de los análisis, pero lamentablemente no lo hay, he estado pensando en qué pudo haber pasado y cómo sucedió esto y la única explicación que encuentro es el accidente que sufriste en Oaxaca hace dos años...
Por favor doctor, hable ya ¿Qué sucede?
Desde hace unos meses han empezado a aparecer enfermos con un mal que de momento no tiene cura, es una enfermedad que ataca las defensas de la gente y las vuelve vulnerables a cualquier infección, se transmite mediante el contacto directo con una gran cantidad de virus que se encuentra únicamente en el semen, en el flujo vaginal, en la sangre contaminada y en menor medida en la leche materna.
Esta enfermedad se caracteriza ya que ataca a los linfocitos T-4 los cuales forman parte fundamental del sistema inmunológico del ser humano. Como consecuencia disminuye la capacidad de respuesta del organismo para hacer frente a infecciones oportunistas originadas por virus, bacterias, hongos, protozoos y otros tipos de infecciones.
Por favor doctor, me confunde y no entiendo nada, ¿Qué enfermedad tengo?
Isabel -dijo el doctor Medina ya con con una mirada que a duras penas ocultaba su pena y lágrimas- Me duele mucho tener que ser portador de tan terrible noticia, cuando te hicieron la transfusión de sangre en Oaxaca, recibiste sangre contaminada, sangre infectada con el virus VIH...
¿Qué me quiere usted decir doctor? preguntó Isabel temblorosa.
Isabel, has sido contagiada del VIH... tienes SIDA!!!
SIDA... SIDA... SIDA... SIDA... SIDA...
Una súbita oscuridad se apoderó de ella... su cuerpo se perdió en un negro abismo... sintió que caía... caía... y caía...
Continuará...
Sagid
(Ben Guillén)
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Sáb Ago 28, 2010 6:23 am
