Druna lo sabía...++++DESTACADO ENERO DE 2010++++

DESTACADO

[quote="A. Elisa Lattke V"]


(® Dibujo a lápiz por: A. Elisa Lattke )


Druna lo sabía...




Todo parecía presagiar un cambio en la vida de Druna, mujer joven bordeando el otoño de su vida. Las cosas no habían salido como ella deseaba. La vida no había sido lo suficientemente generosa como para sentirse feliz. Y, el tiempo iba marcando su rostro con sus huellas de ineludible reproche, marcas de sus experiencias amorosas y de sus
años sostenidos al borde de ese abismo llamado Amor, donde aún seguía perdida sin encontrarlo. Todo parecía inútil y nada para ella había sido perfecto o agradable, salvo esa pasión desenfrenada a la que se había entregado, desde que conociera al único ser que había podido rescatarla de su muerte espiritual.

Su rostro era aún bello pero en él se marcaba la tristeza y dejaba ver un rictus de amargura, que incluso realzaba su expresión, haciéndola muy interesante y atractiva, desde donde miraban unos almendrados y tristes ojos azules.
Su atribulada alma no sabía dónde estaba, "¡cómo llevársela si su sitio estaba allí! - se decía así misma muchas veces y, esta vez, conteniendo el llanto. Así que decidió irse sin ella, dejarla para siempre, necesitaba encontrarse de nuevo así misma, ya no aguantaba la vida ni a su pareja, eso creía en medio de la ofuscación y el temor de perder lo más hermoso que le había ocurrido en su vida... ¡haber encontrado el verdadero amor, el significado verdadero de ese sentimiento por primera vez y sentirlo cada día, con esa suma necesidad de ser en el mismo su pertenencia!

Todo parecía acabado, saldado y pagado a un precio muy alto: su tiempo, su vida y hasta su pobre alma tan perdida y sin hallarse. No, no quería llorar, ya había llorado demasiado y, además, se iba para siempre, necesitaba ese viaje, desaparecer de una vida única y amada. Era invierno y no era lo más oportuno llevar unas gafas oscuras delante de su rostro, se decía mirándose a un espejo con los ojos enrojecidos.


Recogió todo lo que quedaba de su vida con cuidado y lo guardó en el maletín azul...Siempre lo llevaba consigo... Cada vez que encontraba algo que había dejado de ver por algún tiempo, estaba en el maletín azul, lo observaba intensamente y procuraba sentirse segura y, si era importante lo depositaba allí dentro para no olvidarlo en ningún lugar donde iba. Necesitaba dejarse llevar por los recuerdos, al fin y al cabo eran los últimos a
los que podría dar un somero repaso y , en ese momento eran como epílogo.
Con gran cuidado recogió cada cosa que creía conveniente llevarse: ropas, calzado, fotografías... Era un rito que la transportaba a otro mundo... ¡y cuántas veces había pasado lo mismo!, todo tenía un significado diferente pero resumía su propia forma de vivir y pensar... ¿Pero cómo llevarse su alma? -Seguía preguntándose-. Cómo, si se quedaba allí y, ella, no quería llevársela, sentía que la tenía desprendida, arrancada, alejada por completo de su cuerpo... ¡Le pertenecía a él! Hasta sus cuadernos de poemas y demás libros recibían el mismo tratamiento, uno a uno los miraba, se los llevaba hasta su pecho y cerraba sus ojos intentando pensar en lo que habían significado en cada momento. Cada uno era un mundo diferente, un instante de amor, ilusión o gran pena… Uno a uno los acomodaba con mimo de forma parsimoniosa y de vez en cuando, miraba el reloj, el que había depositado la noche anterior en la mesita próxima al lecho donde tantas veces la pasión y el amor habían fraguado el sentimiento. Por fin decidió recoger el reloj y ponérselo, lo mantuvo un rato en una de sus manos mientras acariciaba sus cabellos con la otra y, mirando la marcha del segundero, quedó con la mirada fija en el mismo...Allí estaba el nombre de él, en el fondo de la esfera, alrededor de ésta y junto al suyo. Cada vez que quería ver las horas ese nombre grabado le recordaba a quién pertenecía… ¡No, definitivamente tampoco se lo llevaría, se quedaría allí mismo con su último poema, el que había hecho para el día de "San Valentín", se lo había entregado con un largo beso y una promesa de amor ineludible! ¿Pero dónde estaba él?...se preguntaba sin poder contener el río de lágrimas.

Ya casi tenía todo dispuesto, miró los billetes de avión constatando las horas y el tiempo que le quedaba. Preparó los zapatos de tacón, los más bajos y cómodos para el viaje. Buscó y comprobó en su bolso de mano todo lo que era imprescindible. Miró la foto de Armando sobre la mesita de noche, por un momento dudó acerca de si guardarla suponía no olvidarle jamás, pero no, para qué..., si aunque fuese escaso su equipaje esa foto ocupaba mucho más espacio en su realidad... No, Armando se quedaría allí como la
mayoría de todo recuerdo que compartía, era suficiente el reloj con su nombre porque su tiempo le pertenecía..., él se lo había dado y ella toda su alma...

Faltaban dos horas para salir hacia el aeropuerto y decidió dar un paseo por los alrededores. Necesitaba ver por última vez esas calles de su barrio tantas veces transitadas con Armando, en uno de esos paseos vespertinos. Ya en ellas después de una larga caminata, se dejó caer sobre un banco de un pequeño jardín cercano a al apartamento que compartían, ni siquiera era suyo, era de él. Allí mismo en ese banco lo había conocido, le encontró solitario mirando sin mirar al infinito. Y se arrepintió de haber decidido despedirse de sus propias huellas, andando sobre ellas de forma inversa. Los recuerdos se agolpaban...¡Él, tan zalamero, inefable, inolvidable, con ese sentido del humor que tanto le gustaba, su forma de ser y hacer tan fogosa, tan buen amante!... ¡Dios, qué pensaba en esos momentos, cómo irse sin decir nada, cómo romper su vida por un instante de celos! No podía substraerse a la realidad que le envolvía, parecía que ese banco donde estaba sentada era mágico… No tenía fuerzas ni para levantarse y abrir los ojos.... ¡Qué forma de seducirla la primera vez y llevársela tan rápido en cuerpo... y alma!

Suspiró profundamente, echándo la cabeza hacia atrás, apretando más y más los párpados para no llorar, casi era ya el momento de subir al apartamento y recoger sus pocas pertenencias. Tan pronto como su gesto traducía sentimientos imborrables y sus lágrimas eran imposibles de controlar, sintió que alguien estaba a su lado y depositaba un beso sobre sus labios. Abrió los ojos porque ese aroma que la inundaba de suavidades mágicas era ya conocido. No pudo decir “no”.

Druna lo sabía... Armando estaba allí, junto a ella, con un enorme ramo de rosas rojas, su mirada y sus besos... Así que el único viaje que haría sería el de siempre, dejando que abarcara todo su cuerpo con sus brazos para rescatar de nuevo su alma; ellos eran su verdadero destino, hogar de sus sueños, parada y fonda de su corazón.



® A. Elisa Lattke Valencia
Abril--06

_________________
"*Un mañana deseado, es sólo un hoy que aún no termina de hacerse realidad.* (Elisa-06)
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ME GUSTO EL CUENTO,AUNQUE NO PUDE IMAGINARME,O MEJOR DICHO METERME EN EL PERSONAJE,PERO FUE ALGO MIO,ME BLOQUEO EL COMIENZO,ESO DE QUE ERA UNA MUJER JOVEN PERO BORDEANDO EL OTOÑO DE SU VIDA,JA COMO QUE AHI ME QUEDE,NO PUDE SENTIRLA NI JOVEN,NI VIEJA,NI NADA,SUPONGO QUE LE DIRIA UNA MUJER MADURA,NO SE DE CUARENTA Y PICO,PERO ESO ME BLOQUEO,O ES JOVEN O ENTRA EN EL OTOÑO DE SU VIDA,JAJA,NO SE.

Código:

[quote="Mateo"]ME GUSTO EL CUENTO,AUNQUE NO PUDE IMAGINARME,O MEJOR DICHO METERME EN EL PERSONAJE,PERO FUE ALGO MIO,ME BLOQUEO EL COMIENZO,ESO DE QUE ERA UNA MUJER JOVEN PERO BORDEANDO EL OTOÑO DE SU VIDA,JA COMO QUE AHI ME QUEDE,NO PUDE SENTIRLA NI JOVEN,NI VIEJA,NI NADA,SUPONGO QUE LE DIRIA UNA MUJER MADURA,NO SE DE CUARENTA Y PICO,PERO ESO ME BLOQUEO,O ES JOVEN O ENTRA EN EL OTOÑO DE SU VIDA,JAJA,NO SE.[/quote]

Citación :

Druna, mujer joven bordeando el otoño de su vida.

Una mujer es joven tanto como un hombre desde una perspectiva diferente a la tuya, porque desde tu edad, que supongo más abajo de los veinte años, se ven las edades y las personas en su físico de diferente manera. No todos conservan aspectos físicos relacionados con los años. Hay quien siendo menor de cuarenta aparenta más y los hay de casi sesenta como un amigo nuestro, que parece de cuarenta. Suerte tiene el tipo y es abuelo con un nieto de veinte años. Eso ya es cosa de la genética. Con diez años las mujeres de 18 y los chicos de 21 me parecían unos viejos.
Bordear el otoño es ir entrando a los cincuenta años.
Mateo , se es joven a esa edad, antes de los cincuenta y a Druna le echaremos poco menos de esos años. Una edad maravillosa en toda mujer, se está en plena madurez. Los concectos cambian según los países y el aspecto , claro está. . Gracias por leerme. Un beso. Elisa.

Excelente cuento,ameno, de fácil lectura que atrapa al lector.Buena ambientacion de la acción,un gusto leerte.
Y por demás decirte que eres una excelente caricaturista,te felicito por esa habilidad que tambien es un arte.

Que las hadas te acompañen

Sólo soy un ser que se entretiene escribiendo, dibujando y otras cositas más .
¡Excelente' es una palabra muy grande para mí. Digamos que habilidosa con unos someros conocimientos sobre la materia, no terminé el último curso de Bellas Artes, pero siempre practico este buen ejercicio.
Un beso compañera. Gracias. Elisa.

Un buen texto Elisa, un personaje bien creado, con una personalidad dubitativa, que se deja llevar por momentos bien marcados, extraidos de su propia experiencia de la vida...es como si, no creyera lo que vive, pensar que lo que vive es sueño...

Muy bien amiga, un gusto leerte...

Besos,

Ignacio

Elisa... nos entrenès leyendo, viendo tus hermosos dibujos, pero.... ¿que màs? mmm, buè, contestà si se puede, eh?

Me encanò! y, sì EXCELENTE, aunque te paresca muy grande.

Besitos

Gra*

JAIME, NACHITO Y GRACIELA, ¡GRACIAS!

Placer que me regaláis con vuestros comentarios. es un corto relato muy sencillito, de andar por casa, son escenas muy lógicas sin asesinatos ni complicaciones. Me gusta enamorar y que mis personajes sientan emociones sin llegar a tanto... Eso sí , la mona del otro relato necesita una enorme sonrisa.
Besos. Elisa.

mariazul11 escribió:

Elisa: esta vez voy a dejar el texto aparte, me produjo una sana envidia tu ilustración, ya que yo todavía la casita la hago con humito en la chimenea, ADMIRO A QUIENES CON UN LÁPIZ O COLORES PUEDEN CREAR.
Eso te hace más completa.
Buen relato.
Besitos
Lili

Un besote es mi debilidad, no digo más. Me alegras.

Que linda historia!!

Esa mujercita no tenía intenciones de irse a ningún lado. Sólo a su casa abrazada a su cariñito.

Me encantó.

María

tequendama escribió:

Que linda historia!!

Esa mujercita no tenía intenciones de irse a ningún lado. Sólo a su casa abrazada a su cariñito.

Me encantó.

María

Seguro que es así, Tequendama... se me antoja un ñoño relato, demasiado real o, mejor es decir, que es muy común estos planteamientos y respuestas humanas en todos nosotros.

¿Dónde andas Tequendama?

Mi abrazo, gracias. Elisa

Muy bonita narración. Me gustan los detalles que relatas, esas pequeñas cosas, recuerdos, que hacen más real e íntima la historia. Muy bonita, sí. Un abrazo.

me impresionó sobretodo, tu forma de narrar.

Impecable narrativa (sobre todo porque en forma muy precisa y económica -en palabras_ sitúa en los gestos del personaje). El ritmo además acompaÑa lo que transmite a cada lector. No sé, como que te sensibilizás con el personaje de Druna, no? Personalmente no sé si sea tan necesario que haya un sacudón en la trama para que atrape la historia. Pero es cierto que eso depende de cada lectura, de cada lector. A mi, me cautivó.
Idem, como Lili, soy de madera y admiro la habilidad gráfica: muy buen dibujo! (especialmente la expresión de la boca y los ojos que transmite mucho). Saludos. Silvina.

Vuelvo por estos lares, para darte mis felicitaciones Elisa, por ser Destacada en este mes, con un relato que bien lo merece...

Un beso,

Ignacio

Mis felicitaciones Elisa.
Un cuento donde se impregna uno con los personajes... una maravillosa forma de narrar...

Feclicidades

¡Bueno, bueno, me habéis sorprendido al iniciar el año!

Gracias a todos los que me felicitáis y dejáis vuestros sinceros comentarios:

Xanino, Antifaz, Sgrassimile, Nachito, Ethel, liel... Mi abrazo. Os quiero de todas formas.

Elisa (¡Regalito de Reyes!)

Merecido y gracias a vos por compartirlo.

Enhorabuena!!
Además de escribir bonitas historias y hacer excelentes caricaturas,te percibo una persona humilde,y eso para mí dice mucho de ti Elisa

¡¡Abrazos de flores de mil colores!!

Xanino escribió:

Muy bonita narración. Me gustan los detalles que relatas, esas pequeñas cosas, recuerdos, que hacen más real e íntima la historia. Muy bonita, sí. Un abrazo.

Xanino, gracias por tu opinión He estado demasiado liada para darme cuenta de todo y ahora contesto esto al percatarme de ello.
Un abrazo. Elisa

pétalosdeseda escribió:

Enhorabuena!!
Además de escribir bonitas historias y hacer excelentes caricaturas,te percibo una persona humilde,y eso para mí dice mucho de ti Elisa

¡¡Abrazos de flores de mil colores!!

Gracias, si eres tanto como una primavera adelantada con abrazos de flores Y yo te digo:

antifaz escribió:

me impresionó sobretodo, tu forma de narrar.

¿Cómo?
Si esto es de lo más simple de contar y está en la realidad más repetida de muchos ceros. Los celos llevan por amor a este tipo de reaciones. el final siempre es el mismo porque hay lo que se cree no tener.

Gracia compañero de foro.
Elisa

Elisa, al contestar he podido leer tu relato, mira tu que esa mujer... esa mujer tiene sentimientos tragicos, y si es como entiendo al final siempre sabe que volverá con su amor.
Me queda la duda si en realidad quiere irse de verdad y no es capaz...

que bien narras! es un gusto leerte.Se que se me olvida muchas veces contestar o comentar, soy despistada y con muchas cosas en mi cabecita...
que no me enrollo mas caray! QUE ME HA GUSTADO TU RELATO!

Loli escribió:

Elisa, al contestar he podido leer tu relato, mira tu que esa mujer... esa mujer tiene sentimientos tragicos, y si es como entiendo al final siempre sabe que volverá con su amor.
Me queda la duda si en realidad quiere irse de verdad y no es capaz...

que bien narras! es un gusto leerte.Se que se me olvida muchas veces contestar o comentar, soy despistada y con muchas cosas en mi cabecita...
que no me enrollo mas caray! QUE ME HA GUSTADO TU RELATO!

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Citación :

Sólo te puedo decir que cuando hay Amor, no podemos cambiar las cosas y sí emborronarlas y hasta causar mucho daño, por tener miedo de nuestros propios sentimientos, incluso. Romper una realidad que se ha enquistado en nosotros y nos hace felices es completamente imposible. Salvo que muramos y de verdad nos larguemos. Pero allí ya no hay forma de deternerse en los detalles para recordar. Ya que el Amor se vive del día a día.

Gracias. Elisa.
Un beso.

La decisiones se toman tantas veces el corazón tengas sus dudas. Recorrer en silencio la despedida buscando la verdad. Cuando hay amor, hay un corazón tocando suavemente las puertas del alma, una oportunidad para existir en el universo.
doble felictaciones
saludos

Martinrenan escribió:

La decisiones se toman tantas veces el corazón tengas sus dudas. Recorrer en silencio la despedida buscando la verdad. Cuando hay amor, hay un corazón tocando suavemente las puertas del alma, una oportunidad para existir en el universo.
doble felictaciones
saludos

Sí Martin, allí está el sentido de todo el relato, precisamente en el recorrido que ella hace de esas pequeñas cosas tan simples y lógicas, cuando pretende alejarse. Los seres humanos somos así de tontos, juzgamos las cosas antes de que nos pasen o nunca nos pueden pasar, por eso nos equivocamos tanto y por eso perdemos oportunidades, embarullamos la vida con nuestras quejas. Hay cosas evidentes que nunca nos deberíamos plantear para dejarlas por miedo al futuro, cuando el futuro es siempre un agradable abrazo de amor, que quizá sea y será el único que nos ha dado claramente la vida, pero como nos desborda amar tanto sin seguridad recíproca, lo mandamos al carajo sin contar con la otra parte, a la que podemos hacer mucho daño y encima a nosotros doblemente. Por eso hay que dejar las cosas claras siempre, aunque deberíamos ir iluminados y no que nos iluminen otros, para no fallar nunca.

Un beso. Gracias, amigo. Elisa