En negativo+++DESTACADO AGOSTO 2015+++

DESTACADO





Kathy trataba inútilmente de corregir la notoria irregularidad en la imagen holográfica que estaba diseñando. Cansada, se cambió a otro cubículo, uno de los muchos disponibles esa noche. La oficina entera había quedado desierta desde horas antes, pero: "El trabajo es el trabajo" —se dijo—, y no iba a permitir que se viniera abajo lo realizado en una semana. Volvió a instalar el programa, esta vez en otra computadora. Cargó los datos y apretó los puños. "¡Anda, anda máquina imbécil!"

Hubo un corte de luz, pero la pila de la computadora la mantuvo andando. Se levantó, y a tientas regresó a su escritorio en busca de una lámpara de mano, sin éxito. En la repisa del escritorio contiguo, un minúsculo halo fulguraba, listo para proyectar el holograma con el modelo arquitectónico del conjunto habitacional que su jefe esperaba para el día siguiente a primera hora. La proyección inició. Una de las casas, sin embargo, seguía mostrando la irregularidad: una infame protuberancia en una de las chimeneas. Kathy miró más de cerca. Juraría estar viendo, en la protuberancia, una especie nariz y una boca que hacía movimientos parecidos a los de un pez en una pecera.

Escuchó un chisporroteo, como el sonido de un cortocircuito, y hubo un destello a su alrededor que la cegó por un instante. Quiso correr, pero solo consiguió darse de cara contra un cristal. Le pareció ver algo en el exterior: unos ojos que la miraban. Pegó su nariz al cristal para ver mejor y se quedó inmóvil. Sintió una llamarada en los pómulos y, tras un chasquido, todo quedó oscuro de nuevo.

Del otro lado del cristal, afuera, su jefe contemplaba con horror el rostro en negativo de Kathy, plasmado en la pantalla de su computadora.

Has escrito un interesante trabajo con un muy buen juego de imágenes, amigo Titán.
Saludos,
José

Es un buen relato. Me gustó.
Nilda