SOLO UN JUEGO
Una fragancia lo llamaba desde el otro lado del bar, esa bella mujer de risos dorados que hacia mas de un mes le había estado seduciendo, el se había dejado llevar como si se tratara solo de un juego, las insinuaciones cada ves eran mas discretas, pero los dos ya sabían captarlas de inmediato, como si se hubiesen estado entrenando para eso, sol0 un roce de piel de mas, un soplido en la copa, un movimiento del cabello, incluso la manera en que evitaban mirarse, eso era mas que divertido, era un dulce juego.
La mujer se levanto para dirigirse al baño, el la siguió con la mirada, cada movimiento del cuerpo de la mujer lo despertaba, parecía que le permitía estar mas alerta, la música suave del local solo aumentaba el deseo de ambos, a un grado que su cerebro parecía mas una mescla de hormonas que de materia gris, estaban nadando en el sudor producido por la emoción de la “caza”.
Un viento leve cruzo todo el lugar, silbando tenuemente, creyó escuchar varias voces, en ese viento que acariciaba su piel fuerte y tosca, la piel que todo aquel que trabaje en alguna industria metalúrgica posee, ciertas quemaduras en su rostro, que en cualquier otro lo harían verse desproporcionado y deforme, pero en el daba cierto aire de salvajismo, ese mismo aire le había permitido tener decenas de parejas en el pasado.
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“¡DAME EL CONTROL O NO RESPONDO!”.
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Una idea nueva cruzo por su mente, ¿Qué tal si se marchaba ahora?, la mujer ya no se veía tan atractiva como apenas 20 segundo, realmente tuvo la sensación de que eso no era lo que quería, decidió tomar su chaleco y sin mirar atrás salió del local, el viento era mas fuerte afuera, así que se cubrió el rostro para poder ver claramente, el chirrido que hacen los letreros hechos con tubos incandescentes era molesto, decidió alejarse de aquel lugar, ¿Cómo le había gustado aquel sitio en primer lugar?, el sentimiento de placer y confort ahora era tan distante que ya no podía identificarlo, tomo el primer taxi que se detuvo, no le pregunto el precio, como acostumbraba, le dijo al conductor que le llevara a la biblioteca mas cercana, tenia unas ansias de leer, una sensación nueva, es como si todo su mundo se hubiese volteado de cabeza, el conductor escuchaba una canción de THE WHO, escucho atento aquella tonada, hacia unos minutos hubiese cantado junto al chofer, ya lo había hecho, pero tenia una terrible ansiedad por escuchar música disco, música de los años 50, rock and roll, quizás algo de twist, su cabeza le dolía, el chofer le pregunto que si se encontraba bien, este le dijo que si, sintió como si su cerebro se volviera liquido, una sensación húmeda le recorrió desde la parte superior del tabique de la nariz hasta los poros, poso un dedo en este, se asusto terriblemente al ver sangre saliendo de ahí.
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¡LE DIRE A MAMA!....
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La sensación de horror se esfumo para dar paso a un recuerdo que se había perdido hacia mucho, metió la mano a su chaleco, ¿no era azul?, ahora era verde…no, siempre fue verde, también se pregunto si ese pañuelo siempre había estado ahí, tenia múltiples manchas de sangre, sentía como si parte de su vida se hubiese perdido, pero tenia la sensación también de tener otra, el mareo lo había confundido seguramente, se dijo a si mismo, se sonó la nariz, cuajarones de sangre mancharon el de por si ya sucio pañuelo, el taxi dio un enfrenon severo, lo ultimo que alcanzó a ver fue como una motocicleta se había incrustado de la parte delantera del vehículo, la cabeza se le sacudió provocándole terribles dolores de cuello y de cabeza, su cuerpo se sintió adormecido, el placer por aquel local había vuelto, también las ganas de volver y tirarse a esa hermosa rubia, la sensación de que esa chaqueta nunca fue verde, la sensación de que quería leer una revista porno y no un libro de poemas, de pronto todo se congelo ante sus ojos, el mismo perdió el estado de su conciencia….
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-¡Jessy tu tiene tu propio hololibro, no tienes por que tomar el mío!, mira lo arruinaste, ya tenia semanas escribiéndolo!.
-el mío se descompuso, ándale déjame jugar un ratito.
El niño le quito el hololibro de las manos de un manotazo, la niña comenzó a llorar, salió corriendo es busca de mama, el niño volvió a lo suyo, a escribir una historia, solo un juego de un niño de nueve años, disfrutando su creación, que mala suerte que nunca sepa que no es mas que una de mis diversiones, y quizás mas allá de la conciencia que me invade se encuentra otro chiquillo, quizás una anciano recordando juventudes, quizás esta vida, esta conciencia no sea mas que un sueño, no una ilusión por que es muy real, al menos para mi, y quien sabe quizás mas allá de la conciencia de otro ser se encuentre otro, como un espejo que se refleja en otro, y quizás, solo quizás, se llegue a un punto de una sola conciencia, inspirada por otras…ahora usted dígame, ¿Qué final le pondrá a la historia?.
FIN……………………