Mañana sera Mañana

Mañana sera Mañana. Autor: Carlos Leonel Baz Selios
CAPITULO 1

1985- Autódromo del Pinar Canelones Uruguay, Rubén Ruiz está piloteando su auto en una carrera falta una vuelta para terminar y se encuentra en el quinto puesto y dice, ¡ahora verán! aprieta un botón rojo que tenía en el volante y la aguja del cuenta kilómetros, empieza a subir repentinamente. Rápidamente alcanza y pasa en la curva al que va en cuarto puesto y sigue incrementando la velocidad la aguja del cuenta kilómetros se encuentra en el tope ya está en la recta final atrás del tercero y el segundo acelera aún más y pasa a uno por la izquierda y a otro por la derecha ahora está persiguiendo al que va en primer lugar y solo faltan 100 metros para llegar a la meta intenta pasarlo por la derecha y este le cierra el paso Rubén le insinúa pasarlo por la izquierda y este nuevamente intenta bloquearlo y Rubén lo pasa por la derecha y atraviesan la meta juntos. Hay expectativa en el autódromo porque no se sabe quién ha ganado y luego de unos segundos se escucha por los altavoces «atención, atención amigos tenemos prácticamente un empate técnico pero según los jueces hay un ganador por escasos centímetros y el ganador es Michael Gursi felicitaciones campeón».
Rubén golpea el volante y dice por poco me confíe demasiado, se acerca al auto de Michael y le dice «te felicito campeón» «oh gracias» le contesta este «estuviste muy cerca, otra vez será, te invito a tomar un trago y así me cuentas de las nuevas mejoras que le has hecho al auto», Rubén le contesta «otro día mejor estoy trabajando en casa en un nuevo proyecto y me siento un poco agotado necesito descansar y mañana nos espera un arduo día de trabajo en el laboratorio» «tienes razón nos vemos mañana» dice Michael «hasta mañana» contesta Rubén con una sonrisa y lo saluda levantando su mano mientras se aleja manejando su auto.
Momentos más tarde Rubén está llegando en el auto a su casa en Montevideo se abre el portón de la cochera y entra. Tras el auto se vuelve a cerrar el portón Rubén baja se despereza enciende la luz dejando ver un pequeño laboratorio. Se dirige hacia un gran bulto tapado sobre un banco de pruebas lo descubre y bajo este Había un extraño motor en el que hace uno años venía trabajando. Lo observa por unos segundos, toma unos planos que tenía sobre la mesa los mira y los vuelve a dejar en su lugar. Observa nuevamente el motor y dice «cuando te termine no abra más contaminación y ya nadie me podrá ganar una carrera», se sonríe y lo vuelve a tapar, apaga la luz y sube las escaleras. Minutos después sale del baño secándose la cabeza luego de bañarse deja la toalla y se tira sobre la cama apaga la luz y se queda dormido.
Algunas horas más tarde un fuerte sonido lo despierta repentinamente abre los ojos y de un salto se pone en pie saca un palo del ropero y abre la puerta lentamente y vuelve a escuchar ruidos provenientes de la cochera se asoma y desde arriba de la escalera ve a tres personas vestidas con extraños trajes que les cubrían las cabezas; saliendo rápidamente de la cochera. Rubén baja las escaleras y sale corriendo a la calle tras ellos y ve una extraña nave de forma esférica con dos esferas más pequeñas girando alrededor de está elevándose en el aire y desaparece repentinamente en medio de un resplandor que ilumina el cielo nocturno cegándolo por un segundo. Rubén queda absorto con su mirada perdida en el cielo por un instante luego observa nuevamente la cochera y entra rápidamente y descubre junto a los planos y el nuevo motor en el que trabajaba un aparato con una pequeña pantalla con números en una cuenta regresiva 8,7,6... Toma los planos rápidamente y sale corriendo de repente la onda expansiva lo alcanza y lo arroja metros más adelante y violentamente cae contra el piso lentamente levanta la cabeza y observa hacia atrás la casa estaba completamente en llamas. Lentamente se incorpora y se aleja rengueando unos metros hasta unos arbustos del jardín y esconde los planos entre estos, da un par de pasos y cae desvanecido. Horas después despierta en el hospital el doctor le dice: « ¿cómo se siente señor Ruiz? que fue lo que le paso» «extraterrestres» balbucea Rubén «fueron extraterrestres pusieron una bomba en mi laboratorio se subieron a su nave y desaparecieron, ¡debo irme doctor debo irme ya!» « ¡No espere un momento!» dice el doctor « ¡antes tiene que recuperarse!» llama a una enfermera mientras lo sostiene esta le da un sedante Rubén se tranquiliza y se queda dormido. El doctor le comenta a la enfermera «dice que fueron extraterrestres» y los dos se sonríen La enfermera sale de la sala y habla con dos personas que estaban esperando uno de ellos anota en una libreta lo que ella le dice. Rubén despierta nuevamente y se encuentra solo en la sala «debo irme» dice aun apesadumbrado toma su ropa y se viste rápidamente y se escapa del hospital. Se baja de un taxi y contempla por unos segundos su casa completamente destruida camina hasta el cerco de arbustos los observa detenidamente mete su mano entre estos y extrae los planos que estaban escondidos, los limpia sube nuevamente al taxi y dice «listo vámonos». Llega a un hotel se baja del taxi y entra pide una habitación, le dan la llave y suben las escaleras abre la puerta entra y cierra con llave, se acuesta exhausto y pone los planos del nuevo motor a su lado en la cama pasa algunas horas Rubén está soñando que está piloteando su auto en una carrera aprieta el botón rojo del volante e inmediatamente su mente se ve invadida con imágenes del ovni, el numero dos, planos de máquinas, el número cero, circuitos eléctricos, el número siete, explosiones atómicas en ciudades, el número cinco, personas que corren gritando y prendiéndose fuego. Repentinamente se despierta exaltado y prende la luz, esta sudado y agitado rápidamente busca una lapicera y un papel y empieza a hacer unos dibujos acerca de lo que Había soñado termina y los observa absorto por unos segundos dice « ¿qué me está pasando? ¡Qué es esto debo estar enloqueciendo!» deja el papel sobre la mesa de luz y apoya nuevamente la cabeza sobre la almohada con la mirada perdida en el infinito techo. Sobre la mesa de luz estaba el papel en el que Había trazado unos extraños diseños del ovni y su funcionamiento. Rubén apaga la luz y se queda despierto en medio de la oscuridad. Al otro día siente un tenue sonido entre sueños. Se despierta y ve que por la ventana entra demasiada luz de día gira rápidamente la cabeza y mira la hora del reloj indica las diez y cinco de la mañana « ¡Oh, no!» exclama «me quede dormido, voy a llegar tarde al laboratorio» y se levanta de un salto. Momentos más tarde Rubén se está bajando de un taxi en la esquina de su trabajo mira su reloj y apurado compra el diario como de costumbre y sigue caminando hacia su trabajo el diariero lo observa alejarse con una irónica sonrisa en su rostro Rubén entre abre el diario para ojearlo mientras camina velozmente repentinamente se detiene y queda perplejo cuando lee en la tapa Rubén Ruiz conocido corredor de autos y prestigioso científico salvo su vida milagrosamente después de una gran explosión que destruyó su casa el señor Ruiz declaro que marcianos le explotaron la casa y luego se fueron en un plato volador. Rubén rompe furioso el diario y lo tira en un cesto de basura y sube rápidamente las escalinatas del instituto de investigaciones en el que trabaja abre la puerta y entra «buen día señor Ruiz ¿qué le paso que llego tan tarde?» le pregunta el portero «no nada importante contesta simplemente no pude descansar bien y me dormí» «a yo pensé que tabes lo habían raptado marcianos» dice el portero sonriendo «a muy gracioso» contesta Rubén y continuaba caminando por el corredor hacia su lugar de trabajo entra en su laboratorio donde ya se encontraba su compañero «buen día Michael» mientras cuelga su túnica del perchero y se la pone «buen día Rubén como estas me entere por el diario lo que te ocurrió, como te sientes?» «Si ya lo leí tergiversaron todo» dice Rubén «perdí todo mi casa mi auto y un nuevo motor en el que estaba trabajando hace años por suerte pude rescatar los planos del motor, pero bueno, estoy bien de salud pude haber muerto ahí». «Disculpa que te pregunte» dice su amigo «tu causaste la explosión experimentando en tu laboratorio o fueron marcianos». «Perdona pero no quiero Hablar de eso ahora» dice Rubén y se sienta frente a un microscopio a observar los circuitos de un pequeño robot de un par de centímetros de diámetro mientras suelda una de sus partes. «Creo que este ya está pronto» dice «probemos su funcionamiento» lo coloca adentro de una tubería de cristal y se sienta frente de una computadora y escribe activar. El pequeño robot empieza a avanzar lentamente por dentro de la intrincada cañería «eso es» dice Michael «está funcionando» «si esto es el futuro» dice Rubén «Algún día los aran tan pequeños como células y salvaran a miles de vidas». En eso alguien golpea la puerta y entra es el portero, «permiso disculpe señor Ruiz el director desea verlo en su oficina de inmediato,» «bueno muchas gracias Alberto ahí estaré». Minutos más tarde Rubén está golpeando la puerta de la oficina del director y entra. «Permiso buen día señor García ¿quería verme?», «buen día si pase Ruiz por favor siéntese no se preocupe no quiero hablar con usted por su llegada tarde me preocupa su salud me entere lo que paso ¿cómo se siente?» «Mejor gracias» contesta Rubén «me alegro pero dígame cómo es eso de que los marcianos le explotaron su casa y luego se fueron en un plato volador señor Ruiz por favor necesito urgentemente que valla al diario se rectifique y diga la verdad que usted causo esa explosión porque no queremos que se ande diciendo que nuestro prestigioso instituto trabajan científicos locos y usted es un brillante científico y no nos gustaría tener que perderlo ¿me entiende señor Ruiz? Rubén sale de la oficina cerrando la puerta de un golpe y sale del instituto con cara de preocupación él portero lo ve alejarse y se sonríe irónicamente mientras mueve la cabeza. Horas mas tarde Rubén esta en el cuatro del hotel durmiendo y nuevamente comienza a soñar está piloteando su auto en una carrera aprieta el botón rojo del volante e inmediatamente su mente se ve invadida con imágenes del ovni, el número dos, planos de máquinas, el número cero, circuitos eléctricos, el número siete, explosiones atómicas en ciudades, el número cinco, personas que corren gritando y prendiéndose fuego. Se despierta respirando agitadamente prende la luz y dice «otra vez no puede ser que me está pasando» busca ansiosamente un lápiz y papel en el cajón de la mesa de luz los extrae y empieza a dibujar extraños diseños de máquinas y circuitos del ovni que vio.
Ala mañana siguiente suena la alarma del reloj. Rubén se despierta y mira la hora rápidamente son las siete treinta de la mañana aún no ha amanecido estira su brazo y lo apaga e inmediatamente se pone en pie.
Momentos después Rubén se baja de un taxi y compra el diario como siempre lo ojea y exclama ahora si se lo pone debajo del brazo y se aleja silbando el diariero lo observa extrañado.
Entra en el instituto de investigaciones con una sonrisa « ¡buen día Alberto!» le dice al portero «buen día señor Ruiz» contesta « ¿qué temprano que ha llegado hoy no ha visto más- marcianos por casualidad?» «Por suerte no» dice Rubén y continua caminando por el corredor sonriendo se dirige a la oficina del director golpea la puerta y entra «permiso buen día señor García ¿cómo está usted? «Buen día señor Ruiz ¿hizo lo que le dije?» «Si por supuesto» contesta Rubén y le tira el diario sobre el escritorio el director lee y se queda atónito En el diario decía Rubén Ruiz se rectifica ahora dice que no vio marcianos ni plato voladores sino que dice haber visto extraterrestres y ovnis. El director pregunta «exaltado ¿pero qué es esto?» Rubén le dice « ¡págueme lo que me debe renuncio!» « ¡No me puede hacer esto!» dice el director, Rubén sale de la oficina golpeando la puerta y sonriendo. Horas más tarde Rubén está haciendo fila en una agencia de viajes llega al mostrador y pide «un pasaje a la ciudad de Artigas por favor» sí señor, le contestan y le entregan el pasaje «muchas gracias» dice, levanta sus valijas y sube al ómnibus viaja durante horas por hermosos e interminables paisajes y pequeños pueblitos a lo largo del camino.
Llega a su destino en el centro de la ciudad de Artigas, el ómnibus se detiene en la plaza abre las puertas y Rubén Ruiz baja las escalerillas con sus valijas camina unos metros y las deja en el piso por un instante se descontractura y lentamente empieza a caminar para un taxi y sube minutos después llega a una casita en las afueras de la ciudad «es aquí» le dice al taxista señalando con el dedo la casa «muchas gracias» le dice, le paga y se va, entra al jardín y sube los escalones hasta la puerta saca la llave de su bolsillo abre la puerta y entra pone las valijas sobre el sillón y de una de estas saca los planos del motor que Había salvado de la explosión los abre y los coloca arriba de la mesa sobre estos se encontraban las hojas con los dibujos del ovni y planos de extrañas máquinas y circuitos con los que había estado soñando los últimos días los observa atentamente unos minutos y dice « mm que interesante pero es imposible» y los vuelve a dejar sobre los planos del motor. Luego entra en el cuarto se tira sobre la cama y dice esto es perfecto y se queda dormido vencido por el cansancio del largo viaje pasan algunas horas y está soñando nuevamente está piloteando su auto en una carrera aprieta el botón rojo del volante e inmediatamente su mente se ve invadida con imágenes del ovni, el número dos, planos de máquinas, el número cero, circuitos eléctricos, el número siete, explosiones atómicas en ciudades, el número cinco, personas que corren gritando y prendiéndose fuego. Rubén se despierta exaltado. FIN DEL CAPITULO 1.

Hola, va interesante el relato
Consejos para los capítulos siguientes. Has mas uso de los signos de puntuación, las comas y puntos, además de hacer mas ligera la lectura, ayudan a agregarle misterio a este tipo de escritos.
En cuanto al contenido, si la trama es principalmente las peripecias de Rubén, capaz ayude a compenetrarse en la narración, alguna descripción del personaje.

Espero haber sido de ayuda, a la espera de los siguientes capítulos
Saludos!

Gracias por los consejos Negro boy a hacer lo posible un abrazo

Hay intriga en esta frenética narración, eso esta bien. Solo cuida la puntuación para facilitar la lectura y ¿tal vez un poco de pausa descriptiva? Es que tengo la sensación de que vas como el Real Madrid cuando contragolpea: a todo gas...

Nada, si ese es tu estilo lo respeto, es solo una opinión.

Me pregunto que increíble máquina saldrá de la mente de Rubén Ruiz...

Gracias Castillo un abraso

Excelentes imagenes, narras muy bien los detalles. Debes hacer mayor uso de las comas.

Saludos.