DUDAS

DUDAS

Cuando terminé de desperezarme, el bostezo fue tan grande que me aspiré todo el aire del dormitorio. La aspirada tenía la fuerza de un huracán. Primero me tragué el cortinado de la ventana, las sábanas, la mesita de luz y hasta el ropero que… aunque al principio se quedó trancado en la traquea, después pasó y se acomodó en el fondo del estómago.

Al perro pude escupirlo después de un rato de buscarlo mirándome la panza con la ayuda de una linterna y un espejito. El pobre no entendía por que me lo morfé de una y salió disparado como una bala del dormitorio.

Voy a tener que resolver esto de los bostezos mañaneros. Ahora me surgió la duda si mi mujer y mi suegra me abandonaron o me las tragué una mañana sin darme cuenta.

Que simpático!!!

Dudas exageradas!muy exageradas.Risasss...



¡¡Abrazos de flores!!

Jajajaja..., muy bueno Ricardo. Un abrazo,
Jose

En tu lugar no abandonaría los bostezos, los perfeccionaría.
Sería estupendo contar con un arma tan poderosa como la tuya. Solo buscaría la posibilidad de encontrar un dormitorio en el Congreso y tener siempre a mano el más poderoso de los digestivos.
Presiento que tu mujer y tu suegra una mañana huyeron despavoridas antes que despiertes.
Un abrazo Cochito.

Un micro excelente,muy grafico y divertido.
Felicitaciones.

Impecable humor Ricardo, como siempre un maestro, besos