El Otro Lado de la Cama

La madre superiora reflexiona al despertarse: "Qué linda noche que he pasado y qué hermoso día hace! Hoy no voy a maltratar a las monjitas del convento, por el contrario, las voy a ir a saludar y desearles un hermoso día"

Acto seguido, comienza a recorrer las celdas de las monjas. Al llegar a la primera, golpea la puerta, entra y dice:

- Buen día sor Inés, espero que haya amanecido bien en este hermoso día. Que lindo le está quedando su tejido!

- Buen día madre superiora. Gracias. Espero que usted también se halle bien. Pero veo que se ha levantado del otro lado de la cama...

La madre superiora resiente este último comentario, pero decide dejarlo pasar. Se dirije hasta la próxima celda, golpea, entra y dice sonriente:

- Buen día sor María, cómo ha comenzado este día precioso? Espero que muy bien. Qué bien que está quedando su trabajo de bordado!

- Buen día madre superiora. Muchas gracias. Estoy muy bien y espero que usted también lo esté. Noto que se ha levantado del lado equivocado de la cama...

La madre superiora se siente un poco más ofuscada por este comentario, pero decidida a seguir con su intención original, sigue recorriendo las celdas del convento.
Las próximas tres monjas la reciben sonrientes, pero todas le indican que se ha levantado del otro lado de la cama.

Ahora realmente cabreada, entra sin golpear en la celda siguiente, se para junto a la puerta con las manos en la cintura, y dice muy malhumorada:

- Buen día sor Marta. Usted también me va a decir que hoy me he levantado del lado equivocado de la cama?

- Buen día madre superiora. Pués si, creo que debo decirle que se ha levantado del lado equivocado...

- Y se puede saber porqué usted supone que me he levantado del otro lado de la cama?

- Y..., porque lleva puestas las sandalias del padre Iñaqui...

Jajajajajajajajaja.

Gracias por pasar, Martin. Saludos,
José