En nuestras vidas y a cada instante tomamos decisiones; éstas lejos de pensar lo que creemos al respecto no se toman para saber qué hacemos sino que es una decisión que tomamos para saber mejor quiénes somos.
Ahora, cuando veo esto, cuando lo descubro, descubro también otras cosas de mi que ignoraba y que ahora me está ayudando a seguir creciendo. Ahora que lo he visto descubro porqué las decisiones que un día tomé me llevaron a esta situación que hoy siento, vivo, tengo y disfruto.
Esperar a ver la vida de otra manera es cuestión de tomar una decisión pero ésta debe tomarse desde el conocimiento de quiénes fuimos antes de tomarla, qué somos en el momento de tomarla y quiénes seremos mañana después de tomarla.
Así veo y descubro que todas las ocurrencias, las situaciones y consecuencias de nuestras vidas se transforman en oportunidades para hacer lo que queramos pero sólo a partir de saber quienes somos antes para saber qué decidir después.
Reflexiones de después de haber leído “Conversaciones con Dios”, de Neale Donald Walsch.
Teknarit, África.