Una cita con papá (relato aporte al día del padre en España)

Una cita con papá:



En estos lados se festeja el día del padre en
Junio. Como, por lo general, los chicos están de vacaciones de verano; se estila
que los pre-escolares celebren por adelantado este día con sus padres. Este año
en particular, “papá” recibió una invitación especial de su nena para asistir a
una cita en la escuela. Si…jueves por la mañana…
Lo maravilloso de esta historia, es la manera
en que los señores padres han hecho malabares con horarios; exigencias de
jefes; días personales y crisis (señora crisis si las hay); para no faltar al desayuno más importante del año (y no de trabajo) Ok…para aquellos cavernícolas…habrá alguno que vaya por la maestra, seamos realistas (…)
Puede parecer insustancial, pero lo solemne de este encuentro especial radica en la manera en que se iluminan las caritas de estos seres cuando aparece papi y trata de ubicar su humanidad en la sillita destinada a un niño de tres años.
Durante “la cita” comparten alguna actividad
destinada a tales fines y un snack. Del memorable momento, quedará una foto y
un recuerdo que probablemente será el sustento cuando, en el camino, estos
maravillosos duendes busquen reafirmación y seguridad. Es un gesto tan simple…tan
simple y tan crucial como una palabra de cuatro letras: papá.
En mis años de incursión en la docencia y en la clínica, he tenido la
bendita posibilidad de ser testigo de sonrisas (en caras chiquitas se ven más
grandes todavía) gestadas por un padre que cambió su hora de almuerzo para
saludar a su hija diez minutos porque a la hora que llegaba nunca la veía
despierta, o un profesional que posterga su desarrollo para estar al pie de su
hijo con necesidades especiales…y esos hombres merecen ser celebrados en su rol
de padres cada día.
Eso si, no me hagan hablar de mi viejo…porque son palabras mayores. Y el orgullo que me crece cuando lo nombro, lo veo y escucho, es semejante a…nada. Me limitaré a decir dos cosas de él: que es sumamente carismático y posee una mirada que, recuerdo, era suficiente para bajar los cambios cuando nos pasábamos de revoluciones, y pedir perdón cuando hacía falta.
Podría llenarme la boca hablando de él…mi viejo es…MI viejo. Feliz día a los
padres! Que disfruten su paternidad hoy y siempre.

Un relato muy tierno y cierto,los que tenemos esa suerte de contar con esos gigantes cerca,que aunque no hablen mucho lo saben todo de nosotros entendemos perfectamente tu relato.
Lastima que hoy en día,algunos valores como la familia,la figura paterna,estan desapareciendo.
Hay que reindivicar eso también,pues es muy importante.
Lindo homenaje.

Un bonito relato Silvina, es verdad, es nada mas sentir que 5 o 10 minutos pueden ser tan importantes para un chiquito que siempre ve esa figura paternal como una imagen a la cual seguir...hoy en día, es común ver a hijos en salas de cuna y jardines, donde se ha perdido un poco de contaacto y cercanía con los hijos y se quiera o no, esa edad es muy importante en el afianzamiento de lazos y de valores, claro, que el trabajo asi lo requiere y de ahí, la importancia de esos minutos que quedan siempre grabados en la memoria de un niño, lo digo por experiencia...ternura y un mensaje poderoso en tu texto...me uno a los saludos a todos los padres de ESpaña en su día...que por lo demas, reinvindica aquella imagen muy necesaria para los niños...

Un abrazo,

Ignacio

Sencillamente me conmovio,un buen texto compañera.

Me llegó al alma....
Un abrazo

BUENO YO SIEMPRE ANDUVE CON PAPAS PRESTADOS Y QUE BIEN CUMPLIERON ,ASI QUE ME SIENTO ORGULLOSO Y ME ENSEÑARON MUY BIEN QUE ES SER UN BUEN PADRE.

Muy buen texto, mis felicitaciones.

Saludos