IGUALDAD ENTRE SEXOS... ¿UNA REALIDAD?

Ya se acabaron los tiempos en los que la mujer era considerada como una especie de accesorio complementario del hombre, esos en los que se ocupaba de las labores del hogar y del cuidado de los niños y los no tan niños. Se acabaron también (quiero pensar) ese tipo de mujeres solamente preocupadas de su belleza exterior y por mantener el dominio emocional y sensorial sobre los hombres utilizando la libido en favor de una manipulación que no es sino recíproca respuesta a la más brava y desmesurada ejercida por el hombre para quien ha tenido (equivocadísimamente) por "sexo débil"; y no es así porque la debilidad propia en un sexo es la fuerza en el otro, y de ahí la forzosa compaginatividad.

En mi opinión las mujeres hacen demasiados esfuerzos por parecerse al hombre, por emanciparse de él haciendo propios unos atributos que se presuponen, asumiendo también sus mismas faltas, así como el hombre (muy poco a poco) va reconociendo su parte femenina quizá, también, para caer en las taras que han quedado fidedignamente plasmadas en la retina del ojo histórico. Y dicho sea esto sin caer en los tópicos que a todos, más o menos, nos vendrán, con cierta recurrencia, a la mente.

Centrémonos en los atributos de hombres y mujeres a lo largo y ancho de nuestro bagaje cultural, asexuémoslos y echemos mano de ellos sin prejuicios ni miramientos, sin pensar si deben de ser propios de hombres o de mujeres, acabando con el sexismo de una vez por todas. NO somos tan diferentes si lo miramos desde esta perspectiva igualitativa, pero son todavía muchos hombres y muchas mujeres remisos a una igualdad para la que todavía no estamos (creo, sin pesimismos) ni entera ni suficientemente preparados... Pero el proceso está en marcha y rezo por que sea irrefrenable.




Adanhiel.

Las nuevas generaciones son un poco más conscientes y reclaman más lo que merecen. Considero que los movimientos feministas y muchas mujeres como dices quieren parecerse a los hombres y eligen igualdad, pero hay que tener en cuenta que fisiológica y anatómicamente, cada sexo es mejor y diferente para ciertos aspectos.

La mujer y el hombre deben potenciarse según lo que son, no según su parecido al otro, de ahí la compaginatividad de la que hablas.

Me gustó tu texto, tocas puntos muy importantes.


Un saludo

Que las diferencias entre hombre y mujer queden concernidas en lo meramente físico, hormonal y estético, si se quiere, no tanto en otros factores de primordial incidencia ético-moral, cultural y de inherentes derechos, en todo el amplio espectro de la palabra.

Tu generación, mi jovencísimo y talentoso amigo, tiene muuuuuucho que decir al respecto, y mucho por lo que reivindicar y luchar en ambas declinaciones: femenina y masculina; en vuestro relevo generacional radica la esperanza de un mundo mejor y más justo... uf, no os arriendo la ganancia pero, sin embargo, en no pocos sentidos, envidio vuestra alternativa. Sois la savia nueva que, bajo ninguna circunstancia, ha de verse adulterada; ¡confío en la juventud, confío en vosotros, Jcarba95! En quién sino habría de hacerlo.

Saludos, compañero de letras.

Más razón que un santo, te diré. Aunque yo no concuerdo con eso de "asexuarlos"; porque sin su sexualidad no se entenderían en la Historia (estoy estudiando Historia y me llama, me toca). Pero sí es cierto, sean hombres o mujeres, son personas, y hay que intentar darles el mismo valor, el mismo sentido, etc. Vamos, no tanto les quitaría las cositas con las que nos diferenciamos, como comprendernos unos y otros y demás rollo (perdón por el palabro, que pudiera sonar ofensivo ).

La verdad, a mí me da mucho asco cuando algunas mujeres pretenden ser hombres; por lo menos en algunos casos. A mí me gustan "cosas femeninas" de una mujer, y cosas que se dicen "de hombres", cuando los hombres no me atraen sexualmente ni nada por el estilo. Pero que intente ser más deshibidas o beber más, por ejemplo, no, no me gusta nada. O a veces imponiéndose ropas que las afean incluso, sólo por decir: "Soy igual que tú, o mejor". A mí esa mujer me da pena. Muchas, o una gran mayoría, se vuelven insípidas y pierden un poco "de mujer", de eso que nos llama, que me llama natural y personalmente, intentando ser un hombre, intentando ser algo que no son: claro que habrá que cosas de hombres que son y pueden ser, pero si se las imponen, sin serlo, van a ser desgraciadas ellas. Eso es lo que me da pena; se perjudican ellas misma: es como una represión de deseo de falo (diría Freud, si viviera). Algunas simplemente aparentan ser hombres, quizás no me gustan físicamente por eso, pero son felices (¡y que nos den a los hombres si no nos gustan así! ¡que les den a los demás!), que creo que es lo que cuenta. El problema que me indigna es que pretensar ser algo que no quieren...

Me encanta esa explicación basada en Atenea, de que ella, asociándola a la feminidad, tiene un resplandor en los ojos que, en lo hombres, en signo de espiritualiadad, cosa que nos atrae. Es una explicación magnífica y preciosa: siempre que me gusta una, es verdad que alguna vez me ha parecido que noto que la brilla los ojos, y ese brillo es como una voz, me dice cosas de ellas. Quizás, sólo sea un reflejo de mí mismo, como los ojos del tigre en la Vida de Pi, pero todos somos un poco "poéticos" o demás, jaja. Hasta yo, que no me van ni modas, gaytrinares ni romanticismos baratos de Mercadona. Posiblemente con este "lado femenino" XD, pueda comprender a las mujeres; aunque, en general, he de decir, por desgracia y sin ofender a fémeninas, que no las entiendo . Bueno, a veces tampoco entiendo a mi género... Lo importante es la empatía.

Un saludete de Samuel.

Con tu aportación, Samuel17993, queda claro que la juventud "tira para adelante". En lo meramente estético y conductual cada vez se estila más la androginia, y me parece bien, cuan más amplia sea la paleta de colores mejor nos saldrá el cuadro, eso no quiere decir que se pierdan conceptos como los de la masculinidad ni la femineidad en hombres y mujeres, podemos darnos por tranquilos que siempre habrá dónde y por quien elegir. Abogo porque la mujer no "copie" los defectos consabidos del rol masculino y viceversa que es, poco más o menos, a lo que nos conducen ciertas tendencias de la presumible "nueva era", con eso me daba yo con un canto en los dientes... Quizás es que espero demasiado de esta mi heterogénea y veleidosa especie... no sé, puede. Esa espiritualidad (tan infrecuente, dicho sea de paso) es lo que a mí me atrae de una mujer, sin pasar por alto el indiscutible deseo sexual que pasa a ser complementario, pero nada más, y es lo que me atrae de una persona, allá venga ésta del mismo Ganimedes y sea una masa amorfa y tentacular; me basta con que tenga un corazón desprejuiciado porque con él el reto de la igualdad entre sexos sería una cuestión de coser y cantar. Tengamos presente cuales son las adecuadas prioridades que tanto a hombres como a mujeres nos irá mucho mejor.

Fuerte abrazo, Samuel.

Mi queridísimo Adanhiel: me complace tener en tí a un amigazo libre pensador e igualitario. Sin confundir los roles (en algunas cosas nunca podremos ser iguales), la mujer ha avanzado denodadamente, en una sociedad que, aunque lo niegue, continúa siendo machista. Creo que las mujeres ( y algunos hombres) nos hemos puesto a seleccionar, en forma cuasi natural, a un "igual" sea hombre o mujer, que nos llene el alma, no sólo el cuerpo. Cuando el sexo, cede, cuando la naturaleza queda satisfecha, como parte fundamental del acercamiento entre dos seres, sean del sexo que sean, llega el momento de la seducción a través de la mente, de la información, de la cultura, de los intereses en común, de los temas del momento, de la política, de la revolución social, de todo lo que forma nuestro aquí y ahora. No debe haber algo más demoledor, para una relación, que uno hable y el otro asienta o conteste con monosílabos. El pavoneo basado meramente en lo físico, se lo dejo a los pavos, que por natura, no tienen otra cualidad a la hora de seducir, pero entre los humanos, me encanta la seducción a través del diálogo, que se pasen las horas, el tiempo, sin que te des cuenta, y termines diciéndote a tí mismo, -esta chica/o me encantó, puedo hablar de todo con ella/él y no aburrirme-. A lo largo de la historia tenemos ejemplos de mujeres que han estado a la altura de los hombres y a veces más. La propia "ama de casa" ha salido a trabajar, mantiene o colabora con el hogar, actúa en política, en religión, en cultura, opina, debate, desarrolla sus potencialidades, sin olvidarse de parir o criar hijos o preparar un rico menú.Los humanos somos multifacéticos, sólo nos hace falta una oportunidad para demostrarlo.Me gratifica que la mujer luche y ejerza los mismos derechos que el hombre, sin caer en burdos y antiestéticos extremos. Aún falta mucho camino por recorrer, tampoco hay que desesperar por demostrar- soy igual a tí- eso se demuestra sólo y a través del accionar, en el campo de batalla. No me desvela el demostrar que puedo ser igual a un hombre, sí me desvela ponerme a su altura a la hora de debatir, dialogar, entretener, una persona que sea puro cascarón y esté lleno de vacuidad, me hace salir corriendo, sea del sexo que sea. La inteligencia, la cultura, los sentimientos, las emociones, la seducción de la palabra, no son vencidos por la fuerza de la gravedad cuando pasan los años, todo lo demás, tiende a "caer" (a lo físico me refiero). Por supuesto que lo primero que nos atrae de otro es su apariencia más o menos agraciada, pero, después, qué???.Fíjate en nosotros, tú, yo y Ricardo, nos sumergimos en charlas, debates, amenos, que nos conquistan (al menos a mí), de igual a igual, me habéis aceptado y lo único que nos diferencia es el nivel cultural y el léxico, que es tremendo desafío para mí ponerme a vuetra altura. Quién iba a decirme mí, hace unos años, que tendría unos amigos virtuales, "hombres" con los que podría sentirme más que a gusto, hablar de igual a igual, conocerlos más cada día hasta poder describirlos, entretenerme, esperar que alguno planteee un tema para poder seguirlo, porque me hace feliz y me gratifica, y sentirme mejor que con algunos presentes en cuerpo y mente. Eso es progreso, eso es conquista, eso es seducción, eso es igualdad, la otra, no me interesa. Los jóvenes lo están practicando, son nuetra esperanza como tú dices, con los excesos que los confunde aún, porque son jóvenes, y porque gozan de una libertad que nosotros no tuvimos ni en sueños, a esa edad. pero van a aprender, ya lo están haciendo, lo veo en mis hijos, tratándos de igual a igual y emprendiendo salidas, viajes, proyectos, juntos, no sólo bebiendo o jugando al sexo desenfrenadamente. Debemos aprender a seleccionar, para eso somos libres, qué nos hace más feliz, e ir en conquista de ello.
Abrazadores Besos igualitarios, mi querido Quijote.Malisa.

Mi querida princesa de Paysandú: Tienes razón, seguimos instalados en la cultura machista y patriarcal herencia de otras épocas en las que la fuerza física y el arrojo testosterónico eran claves para la sobrevivencia, pero ese ciclo evolutivo hace tiempo que terminó dando paso a una sociedad presumiblemente inteligente donde otros requisitos se hacen preponderantes, como en el de la capacidad intelectiva en la que si la mujer no se ha puesto antes a la altura era por el temor del hombre y por un contraproducente complejo de inferioridad reforzado por ciertos estúpidos y obsoletos clichés construidos tanto por hombres como por mujeres de diferentes condiciones y períodos históricos; esos tiempos han de quedar definitivamente atrás pues el camino evolutivo que queda por cubrir es largo y cambiante y nosotros debemos de mutar con él o la esperanza quedará reducida a agua de borrajas, Y ESO ES ALGO QUE NO VA A SUCEDER, pero sin escatimar recursos multifacéticos provenientes de la innata capacidad de los hombres... y de las mujeres, así, de consuno, sin tabúes, sin prejuicios, sin miedos y, por supuesto, sin rencores por ambas partes (si es que de "partes" hablamos, y no de la unidad a la que estamos irremisiblemente avocados. De eso se trata, de UNIDAD). Que el hombre siga siendo hombre y la mujer, mujer, pero en igualdad de condiciones, y que la persona y sus cualidades más elevadas sean las que primen en la relación interpersonal, salvando los mermadores convencionalismos pasados de fecha, obsoletos, que ya no nos sirven, y sin caer en perjudiciales extremismos que sólo llevan a la confrontación, al desvirtuamiento y a una insana competitividad que no tiene sensata ni cabal razón de ser. La mujer no tiene que demostrar nada, no tiene que demostrarse nada... nuestra especie, sin embargo, sí que tiene que hacerlo sobreponiéndose a sí misma, ¡ese es el auténtico desafío al que no podemos ni debemos perderle la cara! Aportemos la experiencia surgida de los penosos antecedentes a las juventudes presentes y venideras para avanzar en este igualitario sentido, como en tantos otros, para cambiar, sí, pero cambiar, mutar, en algo mejor, diferente, y, cómo no, para bien.

Has puesto nuestro ejemplo (el de nosotros tres) y, sin presuntuosidad, te digo que lo has hecho con acertado tino; Ricardo y yo no perdemos cuenta de que eres mujer, sin embargo, ante todo, eres amiga, partícipe de letras y de profundos sentimientos; el trato es igualitario, aunque no sea igual pues cada cual es cada cual (no es lo mismo para mí mi adorado Sancho Panza que mi idolatrada Dulcinea, es obvio), y en esa diferencialidad, sexual y de otras índoles, reside el encanto de nuestra unión... ¿ves? UNIDAD, una vez más, UNIDAD, una fórmula magistral que tan sólo usamos cuando nos vemos individualmente sobrepasados y con el agua al cuello; si Lola Flores viviera cantaría aquello de pena penita peeeeenaaaa.

En fin, me extendí un poquito pero creo que mereció la.... peeeeeenaaaa, jaja...

De este atribulado hidalgo (hombre al fin y a la postre) a esa mi dulce dama (que trasciende a la común mujer) en pos de un igualitario futuro... Besssssos.

MALISA - ADANHIEL

ADANHIEL - MALISA



MAESTROS.

Los leí atentamente, nada que agregar, está todo dicho.
Un placer compartir con ustedes.

Tú que nos ves con buenos ojos, Ricardo- Sancho de mis entretelas, sí que eres maestro en la amistad que nos tienes.

¡ABRAZO AL CANTO!

Y un placer el compartir contigo, amigo Cocho, y un privilegio el sabernos leídos por ti.

Saludos.

QUERIDO ADANHIEL. EXCELENTE TODO LO QUE ESCRIBISTE.SOS UN SEXOLOGO INNATO FUI OFICIAL DE LA BONAERENSE, ES VERDAD QUE SE COMPITE CON EL OTRO SEXO: TIRE TODO AL DIABLO. AHORA USO MEDIAS DE SEDA, TACOS ALTOS Y POLLERA. ESPERO QUE NO CRITIQUEN MI CONFECION. A TUS ORDENES,JE,JE,JE. UN BESO GRANDE Y HASTA PRONTO.

La competencia es una cosa y la competitividad otra, y cuando excede la sana autosuperación (que es la competencia con uno mismo) comienza el perjuicio. Por lo que dices sabes muy bien de lo que hablo; esto no es una competición de ambiguas reglas en donde todo vale... o al menos no debería de serlo, ¿verdad?

Seguro que esas medias y esos tacos altos te hacen sentir bien, ¡pues eso es lo importante no más! Y seguro que más de uno salió ganando con el cambio, Verushka.

A tus órdenes quedo yo, besos.

Ricardo Colella escribió:

MALISA - ADANHIEL

ADANHIEL - MALISA



MAESTROS.

Mi querido amigazo: no me sobreestimes, que cada vez tengo que esforzarme más para "igualar" a mi dos queridos y sapientes escritores. Me estáis enseñando, y mucho, con vosotros me he animado a exponer pensamientos e ideas como nunca antes lo había hecho!!! Gracias por vuestra amorosa e invalorable aceptación y amistad. Besazossss. Malisa

Ricardo Cesar Garay escribió:

Los leí atentamente, nada que agregar, está todo dicho.
Un placer compartir con ustedes.

Viniendo de usted, Maestro, sus palabras son flores. Besossss. Malisa.

VERUSHKA escribió:

QUERIDO ADANHIEL. EXCELENTE TODO LO QUE ESCRIBISTE.SOS UN SEXOLOGO INNATO FUI OFICIAL DE LA BONAERENSE, ES VERDAD QUE SE COMPITE CON EL OTRO SEXO: TIRE TODO AL DIABLO. AHORA USO MEDIAS DE SEDA, TACOS ALTOS Y POLLERA. ESPERO QUE NO CRITIQUEN MI CONFECION. A TUS ORDENES,JE,JE,JE. UN BESO GRANDE Y HASTA PRONTO.

Mi querido compañero, sinceridad, autoreflexión, unidad, y aceptación de las oportunidades para ser felices. Bienvenido a nuestros debates!!!. Es encantador que se vayan sumando. besossss. malisa.

Adanhiel escribió:

Que las diferencias entre hombre y mujer queden concernidas en lo meramente físico, hormonal y estético, si se quiere, no tanto en otros factores de primordial incidencia ético-moral, cultural y de inherentes derechos, en todo el amplio espectro de la palabra.

Tu generación, mi jovencísimo y talentoso amigo, tiene muuuuuucho que decir al respecto, y mucho por lo que reivindicar y luchar en ambas declinaciones: femenina y masculina; en vuestro relevo generacional radica la esperanza de un mundo mejor y más justo... uf, no os arriendo la ganancia pero, sin embargo, en no pocos sentidos, envidio vuestra alternativa. Sois la savia nueva que, bajo ninguna circunstancia, ha de verse adulterada; ¡confío en la juventud, confío en vosotros, Jcarba95! En quién sino habría de hacerlo.

Saludos, compañero de letras.

Es un honor saber que así como vos, hay personas que le depositan la fe a nosotros los que estamos llegando. Cada día hay más personas conscientes en buscar lo mejor para él y para el otro, en el constante desarrollo de un mundo mejor.

Creo que el resto ya ha sido dicho en los otros comentarios.

Un saludo muy especial.