Viejita Ingeniosa

Una simpática dama entrada en años decidió regalarse para su cumpleaños el gusto de pasar la noche en uno de los hoteles más caros de su ciudad.

Cuando a la mañana siguiente se acercó al mostrador del lobby para pagar su estadía, el recepcionista le entregó una cuenta por 350 dólares.

Ella se enojó y exigió saber por qué la cuenta era tan alta.

- Es un buen hotel pero las habitaciones sin duda no valen 350 dólares por pasar una sola noche..., y sin desayuno.

El empleado le dijo que 350 dólares era la "tarifa estándar", por lo que la viejita solicitó hablar con el Gerente.

El Gerente apareció y advertido por el empleado de recepción le anunció:

- Señora, el hotel tiene una piscina de tamaño olímpico y un gran centro de conferencias, que están disponibles para su uso.

- Pero yo no los usé - Respondió la dama.

- Bueno..., las instalaciones están allí, y usted pudo usarlas - Explicó el Gerente.

Luego pasó a explicar que ella también podría haber visto uno de los espectáculos internacionales del hotel por lo cual era famoso.

- Los mejores artistas internacionales se presentan aquí - Le dijo el Gerente.

- Pero yo no fui a ninguno de esos shows - Replicó obstinada la viejita.

- Bueno..., nosotros los tenemos, y usted los hubiese podido ver - Contestó el gerente.

Sin importar lo que el Gerente seguía mencionando, ella invariablemente respondía:

- Pero yo no hice uso de ninguna de esas cosas...

El Gerente no se inmutó, por lo que la dama finalmente decidió llenar un cheque y se lo entregó.

Cuando el gerente vió el cheque, exclamó sorprendido:

- Pero señora..., este cheque está hecho por sólo 50 dólares.

- Eso es correcto. Le he descontado 300 por mis servicios sexuales - ella respondió muy calma.

- ¡Pero si yo ni siquiera entré en su habitación! - Dijo el Gerente muy indignado.

- Bueno..., mala suerte. Yo estube allí, disponible, y usted bien pudo haberlos disfrutado...

Me alegro que te haya gustado, Manu. Gracias por pasar. Un beso,
José

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Gracias por tu paso, amiga Karla. Saludos,
José