El Perrito y el Gato. (Fábula).+++++RECOMENDADO DE OCTUBRE++++

RECOMENDADO



Cuando Micifuz vio por primera vez al cachorro que llevaban sus amos en una caja de zapatos, entró en un ataque de celos y odió desde entonces al inocente animal.
_ ¿Por qué traen a este asqueroso y sucio perro a MI casa? _ se quejaba el minino.
En cuanto estuvieron solos las emprendió contra Cachupín, nombre que le dieron al simpático perrito y se las cantó claramente.
_Escucha, advenedizo, aquí no hay lugar para ti _ el cachorrito lo miraba sin comprender tal ataque.
Pasaron los meses el pequeñín se transformó en un enorme can, siempre sojuzgado por el gato, que le provocaba miedo desde chico con sus arañazos.
Pero, como todo tiene su fin, un día le colmó su paciencia cuando, como siempre, pasó corriendo por su lado y lanzó otro rasguño a sus patas, pues ya no alcanzaba su nariz, y tiró la cubeta con su comida.
Con un manotazo lo volteó por sorpresa, puso la pata en el cuello al asustado felino que trataba inútilmente de zafarse del poderoso mastín.
_Hasta aquí te llegó, gato maula _ le dijo con feroz ladrido.
_No me mates, por favor perrito _suplicaba el abusivo y cobarde. –Sólo soy un pobre gatito y tú eres grande y fuerte.
_Entonces ¿Por qué te aprovechaste de mi debilidad y me maltrataste siempre que podías?
_Pensé que era natural que yo, siendo la más antigua mascota en esta casa, tengo derecho sobre ti _respiraba apenas Micifuz. _Por lo demás tú permitías que yo te diera zarpazos, por lo que creí te gustaba.
El perro se sintió confundido; el abusivo tenía razón, por lo menos en parte, meditaba. Justo, cuando era pequeño llegó a ocupar el puesto de mascota junto al gato, pero esto no le daba derecho a lastimarlo. Pero, la parte mala, siguió pensando, fue dejarme dominar por este animalejo engreído y celoso, siendo yo tan fuerte.
Hechas estas reflexiones, soltó al felino.
_Eso era antes y debí detener tus abusos cuando crecí. Ahora soy yo quien manda entre las mascotas de la casa, ¿Quedó claro?
El gato, que no era estúpido, humillado se alejó de las poderosas mandíbulas del que un día cachorro fue.

Moraleja.

A gato celoso y atropellador
Perro fuerte y mordedor.

Que no abusen nunca contigo
Ni aceptes maltrato
Sea amigo o enemigo
Menos de un infeliz gato.

Bueno, como siempre Jaime tus fabulas extán excelentemente bien escritas, amenas, y con una moraleja que que mas decir, gran enseñanza...es facil en tantos aspectos dejarse abusar por alguien que se cree que con estos actos es mas fuerte...pero no, y como tu dices, todo tiene su limite, pero eso si, jamas uno debe dejarse maltratar por nadie...gran cuento, gran moraleja...

Abrazos,

Ignacio

MUY BUENO, NO HAY QUE DEJARSE PASAR POR ENCIMA,Y TAMPOCO ABUSAR DE NADIE,PORQUE QUIEN TE DIGA,QUE ESE ALGUIEN DESPUES NO CREZCA,JA ME RECORDO A MI HERMANO
DESPUES DE LOS DOCE AÑOS YA NO LE PUDE MANDAR MÁS JA,ESTA MAS GRANDE QUE YO.

Muy buena fabula compañero, dejas el mensaje muy claro.Solo haciendonos valer es que saldremos adelante.
Un abrazo fraterno.

Muy buen cuento Jaime,lo felicito por la fluides de sus escritos,y por lo fácil que llega al lector.
Un texto inmejorable.
Un abrazo

ME GUSTO MUCHO ESTE CUENTO,DA UNA GRAN LECCION,NO DEJARSE NUNCA PASAR POR ARRIBA,NI TAMPOCO HACERNOS LOS VIVOS,NO VAYA HACER QUE NOS PASE COMO ALGATO.
MUY BUENO.

Excelente historia compañero,una fabula perfecta como tu sabes entregar.
Una leccion sin duda para el gato...y para el perro.Ni que decirte que nos dejas una enseñanza a nosotros.
Quererse, tenerse autoestima es fundamental,como es fundamental saber respetar a los otros,y valorarlos por otras cosas.
Los celos nunca son buenos asesores.
Un excelente texto amigo. Que las hadas te acompañen.

Como siempre Jaime deleitándonos con tus Fabulas... en esta la confrontación entre gato y perro con un mensaje de respeto y amor propio....
Como siempre Mis felicitaciones...
Un abrazo

Lo volví a leer,y me volvió a encantar.
Tus fábulas siempre me enseñan algo.
Un abrazo y un beso,
Juan Cruz.

Felicitaciones, a mi humilde opinión tus textos son todos recomendables.

Que las hadas te acompañen.


Mes de espantos y Brujas.

ME GUSTA LEERTE,ES LA TERCERA VEZ QUE LEO ESTE CUENTO Y SIEMPRE ENCUENTRO ALGO DIFERENTE.
GRACIAS SE APRENDE TIO CONTIGO.

JAIME,A MIGO, hermoso cuento moraleja, deja enseñanzas como siempre, apegñandose a refranes como:
El pez grande se come al mas pequeño
Bueno es cilantro pero no tanto
El que se vuelve miel se lo comen las hormigas
Hasta aquì me trajo el rìo,
jajajajaaj
Abrazos

TRINA