Buenas ramas

Su cama estaba ubicada cerca de la ventana que daba al patio de su casa. El único espectáculo que tenía ante sus ojos eran las múltiples hojas del gran árbol que cubría la totalidad del marco de la ventana. Cada mañana al abrir sus ojos recorría las hojas, unas más verdes que otras y en medio de sus ramas los rayos del sol que se colaban y que a ella poco le importaban. Su ánimo vivía suspendido en la nada, era como si su cuerpo fuera sólo un caparazón viejo y tostado. Esta situación era el resultado de aquél funesto día que vio cómo toda su familia fue vilmente asesinada en esa maldita guerra que justamente duró 1.000 días. Así transcurrían sus días, inmersa en las sombras de aquél viejo árbol, único testigo mudo de sus lágrimas y tristezas. Era el único que la escuchaba pacientemente y le brindaba un poco de paz.
Una buena mañana despertó pero no estaba en su cama, estaba sobre varias ramas del árbol que habían adquirido forma de cuna. Sintió el olor casi ácido que emanaba de las ramas y el movimiento de alguna de estas tocándole suavemente su cuerpo. Sintió frío, un frío intenso que hizo que se percatara de que tenía aún cuerpo. Se quedó dormida para siempre.
Y con ella murieron las escenas de guerra, los pensamientos sin respuestas, las voces vociferantes y las otras pidiendo súplicas; murió el olor a la sangre, se silenció el eco de los disparos que cegaron el cuerpo de cada uno de sus seres queridos y que la habían acompañado desde niña, todo esto quedó en el mundo que acababa de abandonar. Por fin se escapó del olor del sudor de aquel matón encima de ella violándola. Su corazón dejó de latir con fuerza ante los recuerdos de su huída escapándose de la muerte, aquella que tantas veces había invocado.
Su alma descansó en buenas ramas.
(Esta historia me la inspiró el árbol de mango que tengo frente a mi ventana).
Mayo, 2010

i Hola Etelsaga !

Estando en tu salsa has descrito una real situación de colombia.
Es una historia cruel, dura, violenta, asquerosa y asesina.
Deaplazamientos en masa; 5.000.000 de desplazados internos hay en Colombia; se podría decir que es toda Suiza desplazada, sin contar a los que hemos tenido que salir del país a consecuencia de esa flagelo que nos consume.

Campesinos despojados de sus tierras; mujeres y niños violados por el estamento para militar y militar.

Una sociedad alienada y reducida a la impotencia, a merced de unas polîticas asesinas y arrodillistas a los intereses multinacionales, " confianza inversionista "; con bases militares para que ultrajen y masacren al país; títeres de los intereses gringos, que han convertido a Colombia en la Israel de Sur América.

Es todo un panorama desolador.

i Así quien no se muere !

ssilvaro.

Me ha encantado tu corto relato, Etel. Profundamente duro y tierno al mismo tiempo- Esas ramas de un verde árbol que se transforman en cuna, ¡precioso! Yo lo encajaría en una prosa poética. Felicidades, amiga, admiro la profundidad de tus escritos, sean serios, tristes o con esa ligera comicidad que sabes darles. Un brazo.

Gracias Ssilvaro por tus palabras, es cierto lo que dices, Colombia es un país hermoso, con gente de muchos valores, desafortunadamente se desangra hace muchos años y esto duele y lo más triste es saber que los de cuello blanco ahora son los delincuentes más grandes, empezando por la cabeza principal. Pero seguimos anestesiados...

Xanino, tienes razón, antes de subirlo no sabía si dejarlo en prosa o en micros, tiene las dos particularidades... Muchas gracias por leerlo..

POr poco leo entre tantas palabras parecidas y, como acabo de escribir un cuento sobre la marcha, pues algo sobre las "ranas", resulta que no , que leo mal y hablas de "ramas"

Si no lo leo estoy pensando que estoy aún nadando en otra charca querida Ethel. Bueno, sí, estoy aquí fuera de la mía. Otra.

Preciosa lectura nos dejas. UN ejemplo y reto a la fantasía. Tanto que me voy a sembrar un mango al lado de mi charca. Si te comes uno guárdame la pepa, eh. Tú siempre estimulando a los novatos en esto de escribir, me encanta que nos entusiasmes. Eres un genio en esto de relatar pequeñas cosas. Se ve que te asomas a la ventana y le robas el aire... ¡Un mango y su manga es lo que mi alma necesita. Te quiero. Elisa.

*Sabes que mi profesor de MEC, Enrique Buenaventura, está enterrado bajo las raíces de un árbol de mango. Lo llevaron allí a América porque procede según me cuenta el biólogo, mi hijo, de Asía. Creo que le dan importancia a estas cosas, pero estoy convencida que los pájaros viajeros llevan todo tipo de semillas en sus buches de un lado a otro, hacen su digestión donde les parece y ¡zas! allí se queda el recuerdo germinando. Creo que si se pudiese sembrar de igual forma (¡Jajajajaj!) una raza de hombres buenos y sensatos en el mundo, no me importaría ser ave en mi nueva historia. Estaría sembrando a diestro y siniestro en cada viaje alrededor del mundo, gente que amara este planeta y lo repoblara de maravillosas mentes.

http://www.infoagro.com/frutas/frutas_tropicales/mango.htm

Elisa muchas gracias. He disfrutado tus palabras con gusto.
"los pájaros viajeros llevan todo tipo de semillas en sus buches de un
lado a otro, hacen su digestión donde les parece y ¡zas! allí se queda
el recuerdo germinando.", excelente párrafo. jajaj..

Un beso para ti

Ethel no te rías más que ya lo hice por ti, pues seguí pensando:
¿Qué cosas le he dicho a Ethel? ¡Por favor, si para tragarse una pepa de mango hay que ser un pajarraco de cuidado y, encima transportarla al otro lado del charco, sin que se le caiga encima a un viajero en la cubierta de un barco!

Un beso de la rana.

bella y dura prosa poética, hasta del hecho más terrible tenés la capacidad de extraer sutilmente esta bella imagen
Una buena mañana despertó pero no estaba en su cama, estaba sobre varias ramas del árbol que habían adquirido forma de cuna. Sintió el olor casi ácido que emanaba de las ramas y el movimiento de alguna de estas tocándole suavemente su cuerpo
Excelente amiga Ethel
Besos
LIli

pues es para mi un enorme placer descubrir estas letrtas que llegan a lo mas hondo del corazon y que hacen que el relato en verdad, se haga corto, muy corto, porque se disfruta de cada parrafo con intensidad. Gracias por compartirlo.

GRAN RELATO...
BIEN LLEVADO CON UN GRAN CONTENIDO LITERARIO Y LLENO DE IMÁGENES ...
ESTO ES UNA VERDADERA PIEZA DE LUZ...
CRÉAME QUE ME HA PARECIDO MUY HERMOSO...
QUE BIEN ...
FELICIDADES MAESTRA....
SU NUEVO AMIGO :
EL CONDHE



*Yo también tengo un árbol de mango...
frente a mi ventana

¿puede alguien vivir un relato? ... sólo tienen que leerte para contestar la pregunta...
un placer leer tus letras.
.saludos corteses...

Un excelente micro Ethel. Fíjate que cuando comencé a leerlo, me imaginé que ese árbol de mango, podría ser la inspiración de este micro (para mi es micro, ja), por las fotos que dejaste en el foro de fotografías. Bueno, la historia en sí es triste, cuenta una realidad, un mirar de la historia en una persona y sus consecuencias, una tragedia lamentable y que además, me dice de esa muerte en vida que sucede cuando la propia vida es vivida, valga la redundancia, de esa manera como la protagonista. Historias que existen, que en el fondo, la muerte viene a ser una mejor vida, pues las pesadillas, como bien tu las describes, que quedan en la memoria y que vienen al recuerdo de manera tenebrosa, es lo mas terrible del mundo. Finalizas con ternura. Con esa compañía provista por el árbol, testigo mudo de aquella muerte en vida y que le da un cierto simbolismo al texto, en esa cuna que por fin, quita el dolor. Excelente relato, triste, intenso, profundo amiga.

besos,

Ignacio

En qué momento mueren los recuerdos que hieren el alma? decir que la amnesia cerebral no recae en nuestros pensamientos, es tarea titánica. olvidar para consumirse luego en el sueño de la soledad; destreza de que también el corazón duerme bajo la libertad de la naturaleza.
me gustó
saludos