No damos para más...Y es por ello que vemos que siguen manchándose las sábanas rasas – ya no almidonadas como antaño – de papel virtual con largos y anchos ríos eternos de tinta antaño de tinta china hoy al golpes de cursor.
Hoy parece que todos tenemos algo que decir incluídos los que no saben qué decir aunque no lo sepan. Así es: todos tenemos algo que opinar sobre quién es más digno o más propicio al fin a la hora de engendrar, de adoptar, de buscar y traer un hijo de otra, o de otro, allá de los mares o de tierra adentro; también de prácticar el sexo oral o incluso de simplemente amar en estos tiempos de cólera gratuita.
Y seguimos...Seguimos argumentando lo gratuito, lo viceral y en ocasiones hasta inútil y todo ello para buscar en las entrañas de la razón ya casi perdida, - o lo que nos han dicho que es la razón – y que no es sino para al final irnos a la cama orgulloso de haber dejado nuestra voz, nuestra opinión y hasta nuestros conceptos – equivocados o no – impresos en la nada porque ya casi nada interesa.
¿ Qué más da a qué saben los besos ?; ¿ a quién ya les interesa ? ¿ quién es el que tiene el terrible y duro trabajo de poner etiqueta a los productos caducados? Sería bueno que dejemos ya de dudar y enterremos en el silencio las verdades absolutas, ésas que sólo traen desgracias y miserias a la Humanidad
¡¡ Con lo hermoso y grande que es querer !!
teknarit, África.