Mientras..., una lagrima caía {Fin}

-Muchas-le dije mientras le ponía el plato en la mesa.
-¡Pero que es esto-dijo con cara de enfado-que es esto, que asco esto yo no me lo como me oíste, se acerco a la gaveta de la cocina y cogio un cuchillo, su furia había crecido en cuestión de segundos.
-¡Manolo tranquilízate mi amor-le intentaba convencer bastante asustada..
-¡No!¡ya estoy harto de que no sepas hacer nada, no trabajas y para colmo no sabes hacer un buen desayuno.
-Cariño yo te hago otro si es lo que quieres-dije atemorizada acto seguido le di con el sartén en la cabeza y eche a correr hacia mi cuarto
-¡no me mates por favor!¡Manolo nooo!,el en seguida se recupero del golpe y me persiguió, cerré la puerta con llave.
-¡Natalia abre la puerta!
-¡Nooo!-dije histérica y llorando.
-¡ABREME LA PUTA PUERTA!
-¡Que noo!
-¡Pues entonces no me dejas mas remedio que tumbarla al suelo!
-¡NOOO!
Me aleje de la puerta, me escondí en el baño, detrás del mueble de las toallas, de repente tumbo la puerta como había dicho, me estaba buscando por toda la habitación,¡
-CARIÑO NO SEAS UNA PUÑETERA ZORRA Y VEN CONMIGO!¡ME TIENES MIEDO EHH!-grito como si estuviera loco, ¡ah ya entiendo estas en el baño! ¡NO!, a que juegas Natalia,¡AL ESCONDITE!.
Intente no respirar pero miro en todo el baño, estaba de espaldas a mi, cogí las tijeras que vi encima del fregadero del baño y se la clave en la pierna, lo hice todo muy rápido, corrí hacia la puerta se las quito sin ningún grito y llego hasta a mi ,no había llegado ni a la puerta de la habitación, me cogio del cuello con el cuchillo en la mano derecha,
-¡QUE AHORA QUE VAS A HACER NATALI!
Me echo encima de la cama y me pego varias tortas, me golpeaba varias veces contra la mesa de noche, me dio patadas y cuando dijo --¡ya no me sirves de nada!,
-¡manolo no me mates, nooo!,
Me clavo una puñalada en la barriga, una y otra vez, lo mire, su cara de satisfacción, cada vez todo lo veía mas oscuro y mientras me mataba, una lagrima caía...


FIN

Sin duda compañero,una historia de muchas natalias, que incapaces de escapar al horror, por mil pretextos, terminan de esa forma.
Un relato donde la exageración no parece superar a la realidad.
Un texto sin duda de denuncia, que ojala tuviera un final diferente.
Muy bien hecho Piitu, felicitaciones, te has puesto en el papel del personaje,lo has sentido y trasmitido muy bien.