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| Tema: CHARLA ENTRE AMIGUITOS (relato a dos manos) Lun Ago 31, 2020 7:09 am | |
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Otra tarde de verano…los chicos con sus bullicios alegraban la plaza vecinal…unos corrían perseguidos por otros…una pelota corría sola…dos varoncitos se pelean para atraparla…en cola esperaban varios, para subir y desde allí arrojarse desde el único tobogán existente…otra tarde en que Mireya y Pedrín, con sus escasos cinco años, estaban sentaditos bajo un inmenso roble, charlando de sus cosas…
-Nunca te pregunté por qué no tienes alguna muñeca, como las otras nenas, ¿es que no te gustan?
-Haaa… Pedrín, claro que me gustan, mucho, muchísimo… pero mis papis no pueden comprarme una, no hay dinero suficiente; todos los días salen a trabajar, de sol a sol y el dinero apenas llega para comer todos en casa: ellos, mis tres encantadores hermanitos y yo. Sabes, la muñeca que más me gusta es esa tan bonita que está en la juguetería de Don Joaquín, en el centro del escaparate repleto de maravillosos juguetes de todo tipo… si quieres vamos a verla juntos; su cabecita es rubia, de oro como el sol, repleta de ricitos con sus lacitos; esos ojitos de mirada dulce, azules como el cielo que brillan como luceros; su nariz, su boquita, con esa sonrisa pícara que la hace irresistible… Te digo un secreto, “me habla”, me dice bajito, “tómame un ratito” y yo, en mis sueños despiertos, la tomo, y la llevo de paseo conmigo mientras camino con papá, mamá y mis cariñosos hermanos. Al volver a casa, la dejo otra vez en su sillita sentadita donde luce esplendorosa como una Reinita.
-¡Qué bueno!...aunque no la conozco ya me gusta tu muñeca, ¿en verdad la sueñas?...no me has dicho como se llama…si aún no tiene nombre te sugiero llamarla Mi Reina, ¿te gusta?...y cuando vaya al centro con mis papis, te prometo que la iré a visitar.
Los ojitos de Mireya, se llenaron de pequeñas lagrimitas, quiso decirle a su amiguito cuanto apreciaba sus palabras, pero no le salió cómo decirlo, y para congraciarlo, le ofreció un chupetín de guindas, que a ella tanto le gustaban…
-¡Es mi Reina! Sin lugar a dudas Pedrín. ¿Cómo has adivinado el nombre que yo le había dado? ¡Realmente eres un genio, un duende maravilloso y sabio! Cuánto te quiero amiguito mío, hermanito bueno y fiel de mi alma. ¿Qué hacemos hoy? Seguimos charlando aquí cómodamente sentaditos a la sombra de nuestro amado roble, viendo a nuestros vecinitos como se divierten con sus juegos dispares, o paseamos tranquilamente por el bosque que rodea nuestro bello pueblo donde felizmente habitamos. Como sabes, está repleto de árboles y entre sol y sombra podemos coger unas lindas flores para hacerle un bello ramillete a nuestras mamis con lavandas, jazmines silvestres, amapolas y margaritas. Poder ver sus caritas llenas de satisfacción, aliviando esos rasgos cansados que muestran sus hermosos rostros fatigados de tanto trabajo realizado,… nos reiremos silenciosamente de las caras sorpresivas como siempre de nuestros papis, mirando de reojo y sonriendo felices, al ver el regalo que le hacemos a mamá y así pagarle todo su esforzado trabajo, sus mimos, sus caricias, sus cuidados que abnegadas realizan cada día por toda nuestra familia. O tal vez un paseo por la orillita del mar, donde sus suaves olitas acaricien nuestros pies con su burbujeante espumita… acompañados por los pajaritos y gaviotas que también les gusta andar de aquí para allá y picoteando en la arena algún rico manjar ofrecido por el mar y esas pequeñas migajas que los niños pequeños acompañados de sus mamás han podido dejar ricamente al merendar. ¡Que bueno, tener donde elegir en un momento determinado, bosque o mar!
-Sabes una cosa, Mireya, siempre me gusta sentarme a tu lado, y escucharte…todo lo que cuentas es agradable, es como soñar con los ojos abiertos, ¿me entendés?, es como viajar a lugares lejanos, de esos que nos imaginamos, de esos que nos encantaría visitar y conocer de cerca…tengo una idea, ¿por qué no hacemos un libro de cuentos…vos imaginas y yo escribo, pues tengo buena letra, así me dice siempre mi papá que es maestro y sabe de esas cosas, ¿te parece buena la idea?
-Que listillo eres Pedrín, te quieres escabullir, lo sé, pues no, no y nooo… tendré que darte una palmadita en la espalda como le hago a mi mamá cuando me cuenta el cuento al ir a dormir. Sea de caperucita, Blanca Nieves o los Cabrititos y el lobo…, cada noche me cambia la versión, nueva acción o los nombres de las personas. Sí, no te extrañe: caperucita tiene nombre propio, la mamá, la abuelita, el cazador y hasta el lobo, ji,ji,ji,.., ya te puedes imaginar, nombres de las personas que viven entre nosotros. Si la persona que llamamos lobo se entera, nos come de verdad a las dos. No me gusta que ponga situaciones diferentes y le tengo que dar un palito con mi mano en su cuerpo y decirle, así no es, te has equivocado, es así, ¿no te acuerdas…? Pacientemente, ella escucha mientras yo le explico cómo está escrito en el cuento de verdad, que tengo guardado en mi mesita en una cajita con otros más, o como me lo ha contado la noche anterior. Sabes lo que creo Pedrín, que lo hace aposta, que goza escuchándome y cuando termino, me dice tan tranquila, cariño mío, lo hago para que no te aburras y ver si realmente te acuerdas del cuento leído por ti. Terminamos abrazadas, haciéndonos cosquillitas, riendo las dos acabando rendiditas. Yo, no me aburro, me gusta escucharlos como están escritos, como yo, los he leído y sigo leyéndolos una y otra vez. Tengo una idea mejor ¿Por qué no me cuentas tú un cuento? Sí, de esos tan bonitos que me has contado alguna vez relatados por tu abuelita, cuando viene a visitaros, tú no haces como mi mami, siempre me los cuentas igual, como tu abuela lo hace, y así podré recordarlos siempre, por toda la eternidad como dice mi dulce y cariñosa mamá.
-Mira que eres caprichosa, siempre quieres salir con la tuya, y conmigo siempre lo lográs, jajaja… Te voy a contar un cuento que leí en uno de los libros de mi papá, espero que sea de tu agrado, así lo recuerdo,,,
La competencia estaba en su apogeo. Decenas de hábiles artistas empleaban sus maestrías para conseguir que su Castillo de Arena sea el elegido en este certamen organizado en la playa. El sol acompañaba al plácido mar en este día de alegría que gustaba a grandes y chicos. Un niño de escasos diez años trataba de crear, con sus pequeñas manitos, pero con su gran imaginación, un diminuto castillito sobre una roca abandonada por el tiempo. Dos cangrejos se acercaron y sin siquiera intercambiar palabra con el niño, decidieron ayudarlo y ni lerdos ni perezosos se dijeron, -manos a la obra- Iban venían...arrastraban minúsculos granos de arena y uno a uno los depositaban sobre la roca; el niño los ayudaba como si de un plan acordado se trataba. Era un espectáculo ver con que énfasis trabajaba el trío. Al poco tiempo, el castillito fue tomando forma...allí las torres...las paredes...algunas ventanitas, inclusive una rampa de entrada... Cuando finalizó el tiempo estipulado, ya era una multitud la que se había acercado para observar la obra de arquitectura del niño. Los organizadores no tuvieron dudas al respecto y por unanimidad otorgaron el Primer Premio al que fue llamado “El Castillo de la Amistad”
...y colorín colorado, este cuento se ha terminado. Y… ¿te gustó?
-Siii... ¡Me encanto! Que bonito Pedrín, "El Castillo de la Amistad " es fascinante, fenomenal, que bella realidad que tú, mi amiguito amado y yo solemos plenamente gozar, al vivir esta experiencia tan maravillosa del Amor que mutuamente nos profesamos. Y sabes una cosa, aunque las olas del mar que arriban y bañan la playa lleguen a inundar este castillito con su tranquila e impetuosa fuerza, jamás desaparecerá. En cada granito de arena arrastrado, sumergido, toda su esencia permanecerá, lo sé, sí…, lo sé, créeme, no me mires así, con esa carita, con esos ojitos de extrañeza, pon tu mano derecha en mi corazoncito y sentirás, como lo siento yo… ¡Siente ese calor, siéntelo! Y donde quiera que se depositen, por muy remoto que sea el lugar, de todo su Amor enriquecerá, haciendo que florezca este sentimiento profundo y bello de fraternidad, de unidad en cada particularidad. ¡Que sabia tu abuelita! Cuantas maravillas porta en su ser, y lo más hermoso las huellas que ha y va dejando a su paso como legado a toda la vecindad.
-Hugs… el tiempo hablando contigo Pedrín, pasa volando, dejemos la charla por hoy y volvamos a casita, nuestros papis se sentirán preocupados si oscurece el día y a casita no hemos llegado todavía. Un abrazo y un besito de despedida como siempre. ¡Que miren, que miren y vean… que piensen… je,je,je…!
-Tienes razón Mireya, se hizo tarde, charlando con vos el tiempo pasa volando, ¿por qué será?...bueno, mañana cuando vuelvas, ya te estaré esperando, y quizás te cuente otro cuentito de los muchos que me contó mi abuelita…estoy tan contento que sos mi amiga…uff… me voy cantando…la la la… ||||||||||||||||||| Personajes Niña….JOSEFA ALCARÁZ MARTINEZ (España) Niño… BETO BROM (Israel)****
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