Costumbres que ya no son

Su majestad, el facultativo

Costumbre que ya no son

Cuando alguien se enfermaba, la llamada al médico tenía características
ceremoniosas. Mi madre traía una silla, alcohol, una carpetita
inmaculadamente blanca y el dormitorio brillaba, había que ordenar:
venía ¡el doctor! médico de cabecera de la familia que atendía desde
una angina hasta una fractura, los huesos viejos de mi abuela y la
rodilla del pobre abuelo que pedía vacaciones.
Hoy, llamás a la Obra Social, lo más probable es que te manden alguien que ni te revise, te diga que se trata de un virus, recurso muy utilizado cuando no se descubre el diagnóstico. Lo más probable es que al tercer día de volar
de fiebre, vuelva y te diga: es bacteriano y te recete antibióticos, lo
cual debiera haber hecho el primer día y te ahorrabas tiempo,
sufrimiento.
Seguramente, si es un chico, lo atenderá la empleada porque ambos padres trabajan y tal vez le cueste transmitir la información del estado del nene que seguirá comiendo salchichas, papas fritas y en vez de guardar reposo se pasará jugando con la play, chocho porque además tiene una semana de joda.
El régimen del enfermo era cuidadosamente modificado : pollo hervido, zapallo, papas, batatas y agua, una gelatina, que la cura de cualquier mal tiene como principio la dieta sana.
Algunas costumbres sería bueno retomarlas, la idea es volver a las fuentes cuando lo nuevo no es mejor.

Lili Frezza

BUENO ACA ALGUNAS COSAS SE HACEN,YO NO SE SI ESPERO AL MEDICO O A UNA VISITA,PORQUE HASTA PERFUME ME PONEN,JA,CHAMPIONES FUERA DE LA PIEZA,,JA Y TODO ACOMODADO,.
Y LAS DIETAS UGH SI,,ESO NO ES JUSTO,(BUENO GELATINAS O AGUA DE OREJONES SI,)
LO QUE MAS ME GUATO FUE TENER PAPERAS,JAJ ,ME COMPRABAN CHICLES TODOS LOS DIAS...
AHHH,Y TODOS LOS YUYOS,NOOOOOO. JAJA.
PERO SI ESCIERTO POR LO QUE ME CUENTAN HAY COSAS QUE CAMBIARON,Y MISMO CUANDO UNO VA A LA CONSULTA,TAMPOCO ES EL MEDICO QUE LO VIO EN SU CASA,A NO SER QUE TENGAS SOCIEDAD PRIVADA.

Ayer: Con respecto a la salud, una costumbre que se ha ido perdiendo poco a poco es la de la dieta de las mujeres cuando daban a luz. 40 días en total reposo, comiendo gallina, chocolate, cuidándose de la luz de la luna... El ultimo día las bañaban en medio de un sahumerio...
Hoy: al otro día se bañan, las más jovencitas salen con el bebé en la noche y en reverendos tacones a bailar!!!...

Ayer: cuando nos daba gripa, no nos dejaban bañar, ni serenar hasta tanto no se nos pasara un poco.
Hoy: es como si no ocurriera nada...
Interesante el tema y ojalá se siga con otros que no tengan que ver con la salud, pero este da para mucho más....
Un abrazo de OSA

Muy cierto lo que cuentas compañera.
El pañito inmaculadamente blanco,y el alcohol para las manos.
El médico oscultaba poniendo la oreja sobre la espalda del paciente.
Cuantos recuerdos.
Esas cosas han cambiado tanto.
Al igual que lo que relata Ethel,antes también, a las embarazadas la hacian comer por dos,y las chicas,en su menstruación las abuelas decian que no se bañaran o mojaran la cabeza,ahora van hasta a la playa.
Muchas cosas cambiaron,por que hay que evolucionar,y mejorar,otras cambiaron para mal.Como la costumbre de la comida casera, en pocos lados aun se hacen las sopas,o pastas caseras...Modernidad que le dicen.
Muy buen tema,y muy buen relato

Como le creo poco a los médicos, que si bien es cierto estudian mucho y saben mucho, a la hora de dar sus diagnósticos ( no todos, por supuesto) lo hacen como comprar un número de la Lotería, escasamente aciertan.
El desaparecido médico de cabecera, que lo conocía a uno desde pequeño, llevaba en su mente cada uno de los achaques del paciente. Voy poco al médico, porque sólo sabe sobre lo que sufro en ese momento e ignora las dolencias anteriores que tuve y que pueden influir en nuestro organismo con el tiempo.
Por otra parte, recién están dando su brazo a torcer con rerspecto a la medicina natural, a la indígena, por ejemplo; se olvidan que los medicamentos provienen de la naturaleza ( la aspirina es extraída de la corteza de los álamos) y esa risita de suficiencia ante remedios como el agua fría, barro, etc., me hace decirles que debían echar un vistacito a la medicina de los pueblos aborígenes.
Bueno, los tiempos cambian... creo que volveremos a la medicina antigua.

Un texto muy bien elaborado, donde muestras esos cambios que supuestamente la sociedad evolucionada tiene, uno se pone a ver,y duda de tal evolucion o avance,muchas cosatumbres se han perdido.
No solo lo que se refiere al médico de cabecera, hasta la costumbre del "Buen Día",o "Buenas tardes" cuando alguien entra a un sitio,o sube a un colectivo...tantas cosas se estan perdiendo.
En cuanto a lo que dice Jaime, tambien es muy cierto, la naturaleza nos brinda todo,y nuestros antepasados sabian de sus beneficios,eso unido a las comidas caseras, sin tanta grasa saturada, seria como volver al equilibrio,pero en fin...avanzamos compañera,y junto con los médicos de cabecera,otras cosas van quedando en el tiempo....¿avanzamos,dije?,que ironico verdad.

Que las Hadas te acompañen.

Un excelente relato. ademas por que es la pura y santa verdad lo que nos cuentas...bueno, es dificil comparar los tiempos, lo unico que yo se es que la gente se enferma mas ahora que antes y eso es bastante extraño los porques?...antes la medicina era mas natu, como también la alimentacion y algunos factores ambientales que lamentablemente tambien influyen...un relato que da para mucho mas como dice Ethel, y sobre variados temas...excelente lili...

Besos,

Ignacio

Prefiero los médicos de antes,porque te conocían más.
Me gustó mucho tu texto. Hace pensar.
Un abrazo y un beso.
Juan Cruz.

Encantador texto que me traslada al pasado. Cuando estábamos pequeñ@s, mi padre nos aislaba al darnos sarampión, lechina, tosferina, paperas, otros. Llamaban al Dr. Castro, nuestro médico de cabecera y nos mandaban dieta estricta, nos compraban hermosos juguetes para entretenernos y no salir del cuarto. También se resolvían muchas enfermedades ayudándose con medicinas caseras donde predominaban las plantas. Yo aun las uso, son mis predilectas porque no dañan el organismo como las medicinas químicas.
Un gusto leerte, abrazos venezolanos.

Lili un relato muy emotivo, recuperado por Trina…. y me lleva a recuerdos de médicos únicos…
En el pueblo teníamos uno (Dr Valenzuela) que iba a las casas sin importar la hora, incluso a costa de no tener con que pagarle. Su frase era: “mañana me alcanza, si puede”; se refería a las órdenes de la obra social…uffff (como extraño esa gran sensibilidad)
Abrazos intensos-

Las costumbres han cambiado tanto que en las ciudades hay que llevar al enfermo al CDI, al ambulatorio, Seguro Social, hospital y si pueden a la clínica. En caso de gravedad, los busca una ambulancia.
Antes, por ejemplo: cuando una mujer daba a luz, generalmente; lo hacía en su casa y si no iba el médico, asistía una partera. La parida guardaba la cuarentena. En los campos, sin salir casi del cuarto por el sereno, con medias y la cabeza cubierta, y bastante hervido de gallina, dieta para poder amamantar. Hoy en día, hay muchas que no les gusta esa función porque se le caen los senos. Vaya que si han cambiado las costumbres.
Cuando pequeña iba a mi casa el Dr Castro que después fue padrino de mi hermano Johny, .- ambos QEPD -.
Este post me serviría para escribir varias anécdotas que ahorita llegan a mi memoria. Pero lo dejo hasta aquí.
Cariños