EL PODER DE LOS DECRETOS

Brevemente queremos referirnos hoy, al poder de los Decretos, que es transmitida a
través de la palabra, o el Verbo.
Sabemos que son vibraciones muy altas que emitimos de nuestros labios.
Estas vienen con fuerza y energía.
Cuando hablamos, de nuestros labios sale la emisión de la voz, la cuale se expresa en
desibeles.
Enseguida nuestra voz se transforma en una frecuencia, o una emisión de
ondas circulares que se movilizan por las moléculas del aire y son dirigidas en
dirección del objetivo en donde estamos dirigiendo la voz.

Hay un instrumento que es el bastón de Zahorí, muy usado en Nueva York, consta de
un mango de bronce y en la parte superior lleva una aguja que sirve como sensor el
cual gira en sentido positivo o negativo.
Cuando se habla en positivo, el instrumento capta la vibración energética
de la onda que lleva lo que estamos hablando o decretando y según su carga
comienza a girar en positivo o negativo.

Si el decreto lleva con ello una buena condensación de energía y emoción su
movimiento circular será cada ves más fuerte esa onda que esta emitiendo toma
contacto con el campo de ionización que se encuentra en las moléculas del aire en
relación al lugar en donde en ese momento estamos actuando.

Si ese campo de ionización a nivel de la energía mental que se denominan
frecuencias microcósmicas, que son las vibraciones mentales suspendidas en el aire
están saturadas de carga negativa, o sea pensamientos de rabia, odios, angustias, etc.,
esas señales se encargarán de debilitar la energía emitida por nuestro decreto, y de
acuerdo con la fuerza de la emisión su efecto se plasmará, sólo se llevará a cabo en
relación a la persistencia de la acumulación de energía que emite nuestra orden.

Vamos ahora a ver algunos ejemplos de cómo podemos decretar ya que debemos
entender que el Decreto es una manera de "pedir" al Universo que se nos entregue lo
que le solicitamos ya que debemos aprender que al Padre no se le pide sino que se le
agradece por adelantado lo que nos va a venir ya que Él sabe perfectamente lo que
necesitamos antes de que nosotros mismos lo sepamos.

Siempre empezaremos y acabaremos el decreto diciendo "YO SOY EL QUE YO
SOY" ya que es el principio y el final de todo decreto ya que simboliza la Esencia
Divina que somos.
Un ejemplo es la enfermedad en la cuál podría ser transmutada de esta forma:


Como puedes observar, estos decretos son enviados al Universo para que se nos
entregue aquello que necesitamos para transmutar la situación que nos está afectando
en este momento. Es fácil, verdad?

Ahora, ya que hablamos de decretos, queremos decretar para TODOS:

"QUE LA LUZ, PAZ Y AMOR, SEA CON USTEDES"
"YO SOY EL QUE SOY"