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| EFRAÍN HUERTA | |
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Invitado Invitado
| Tema: EFRAÍN HUERTA Lun Abr 04, 2011 6:52 pm | |
| Efraín Huerta
(Guanajuato, 1914 - Ciudad de México, 1982) Poeta mexicano, sin duda uno de los autores de mayor popularidad en su país en la segunda mitad del siglo XX. Llegó a la ciudad de México a los dieciséis años e ingresó a la Escuela Nacional Preparatoria para, posteriormente, seguir la carrera de leyes en la Universidad Nacional. Junto con O. Paz perteneció a la generación que se forjó en torno a la revista Taller (1938-1941).
Poeta de fina sensibilidad y acendrada conciencia social, sus libros, al igual que sus colaboraciones en prosa en los periódicos y revistas de su época, dan cuenta de esa pasión por el optimismo amoroso y la redención del hombre. Fue simpatizante y luego militante de izquierda, lo que combinó con su ejercicio periodístico como crítico de cine. En 1976 se le confirió el Premio Nacional de Letras.
Su poesía conjuga el amor, la soledad y la protesta política, así como la sutileza verbal, el humor y la enérgica expresión coloquial. Entre sus libros fundamentales están Absoluto amor (1935), Los hombres del alba (1944), La rosa primitiva (1950), El Tajín (1963), Poemas prohibidos y de amor (1973), Circuito interior (1977) y Estampida de poemínimos (1980). Entre sus textos emblemáticos varios de ellos versan sobre la caótica vida urbana ("Declaración de odio", "Declaración de amor", "Avenida Juárez", "Juárez-Loreto") y acerca de la injusticia social y la violencia de los mecanismos del poder ("Los perros del alba", "Elegía de la policía montada").
Escribió profusamente sobre el tema del amor, percibiéndose en sus versos una ternura desolada no exenta de rebeldía. Uno de sus mejores poemas es, sin duda, "El Tajín", en el cual, con gran lirismo y con exacta eficacia en el uso de sus recursos verbales, recrea la grandeza de una antigua cultura mexicana (la de los indígenas totonacas de una región del estado de Veracruz) y la magia de la contemplación y el asombro.
En sus últimos años exploró, con notables resultados, el humor lírico a través de brevísimas composiciones que denominó "poemínimos" y que, por medio de paradojas, ironías y acertados juegos de palabras, ofrecen una visión crítica y a la vez tierna de la realidad. Su Poesía completa se publicó en 1988.
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/huerta_efrain.htm
Absoluto amor
Como una limpia mañana de besos morenos cuando las plumas de la aurora comenzaron a marcar iniciales en el cielo. Como recta caída y amanecer perfecto.
Amada inmensa como un violeta de cobalto puro y la palabra clara del deseo.
Gota de anís en el crepúsculo te amo con aquella esperanza del suicida poeta que se meció en el mar con la más grande de las perezas románticas.
Te miro así como mirarían las violetas una mañana ahogada en un rocío de recuerdos.
Es la primera vez que un absoluto amor de oro hace rumbo en mis venas.
Así lo creo te amo y un orgullo de plata me corre por el cuerpo.
http://amediavoz.com/huerta.htm#ABSOLUTO%20AMOR
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| | | sgrassimeli Escritor activo
Cantidad de envíos : 5984 Fecha de inscripción : 07/04/2008
RECONOCIMIENTOS Mención: POEMA EXCEPCIONAL: CUANDO ME NOMBRAS- a la excelencia en sus comentarios Mención: - por sus Aportes a Letras y Algo Más Premios: 2º Lugar Concursos Letras y Algo Más
| Tema: Re: EFRAÍN HUERTA Vie Abr 15, 2011 10:07 am | |
| Excelente aporte, Blanca. Disfrutado con gratitud. Te dejo un poema que encontré que se le atribuye en el enlace que le sigue abajo.
"DECLARACIÓN DE ODIO
Estar simplemente como delgada carne ya sin piel, como huesos y aire cabalgando en el alba, como un pequeño y mustio tiempo duradero entre penas y esperanzas perfectas. Estar vilmente atado por absurdas cadenas y escuchar con el viento los penetrantes gritos que brotan del océano: agonizantes pájaros cayendo en la cubierta de los barcos oscuros y eternamente bellos, o sobre largas playas ensordecidas, ciegas de tanta fina espuma como miles de orquídeas. Porque, ¡qué alto mar, sucio y maravilloso! Hay olas como árboles difuntos, hay una rara calma y una fresca dulzura, hay horas grises, blancas y amarillas.
Y es el cielo del mar, alto cielo con vida que nos entra en la sangre, dando luz y sustento a lo que hubiera muerto en las traidoras calles, en las habitaciones turbias de esta negra ciudad. Esta ciudad de ceniza y tezontle cada día menos puro, ciudad de acero, sangre y apagado sudor.
Amplia y dolorosa ciudad donde caben los perros, la miseria y los homosexuales, las prostitutas y la famosa melancolía de los poetas, los rezos y las oraciones de los cristianos.
Sarcástica ciudad donde la cobardía y el cinismo son alimento diario de los jovencitos alcahuetes de talles ondulantes, de las mujeres asnas, de los hombres vados.
Ciudad negra o colérica o mansa o cruel, o fastidiosa nada más: sencillamente tibia.
Pero valiente y vigorosa porque en sus calles viven los días rojos y azules de cuando el pueblo se organiza en columnas, los días y las noches de los militantes comunistas, los días y las noches de las huelgas victoriosas, los crudos días en que los desocupados adiestran su rencor agazapados en los jardines o en los quicios dolientes.
¡Los días en la ciudad! Los días pesadísimos como una cabeza cercenada con los ojos abiertos. Estos días como frutas podridas. Días enturbiados por salvajes mentiras. Días incendiarios en que padecen las curiosas estatuas y los monumentos son más estériles que nunca.
Larga, larga ciudad con sus albas como vírgenes hipócritas, con sus minutos como niños desnudos, con sus bochornosos actos de vieja díscola y aparatosa, con sus callejuelas donde mueren extenuados, al fin, los roncos emboscados y los asesinos de la alegría.
Ciudad tan complicada, hervidero de envidias, criadero de virtudes desechas al cabo de una hora, páramo sofocante, nido blando en que somos como palabra ardiente desoída, superficie en que vamos como un tránsito oscuro, desierto en que latimos y respiramos vicios, ancho bosque regado por dolorosas y punzantes lágrimas, lágrimas de desprecio, lágrimas insultantes.
Te declaramos nuestro odio, magnifica ciudad. A ti, a tus tristes y vulgarísimos burgueses, a tus chicas de aire, caramelos y films americanos, a tus juventudes ice cream rellenas de basura, a tus desenfrenados maricones que devastan las escuelas, la plaza Garibaldi, la viva y venenosa calle de San Juan de Letrán.
Te declaramos nuestro odio perfeccionado a fuerza de sentirte cada día más inmensa, cada hora más blanda, cada línea más brusca.
Y si te odiamos, linda, primorosa ciudad sin esqueleto, no lo hacemos por chiste refinado, nunca por neurastenia, sino por tu candor de virgen desvestida, por tu mes de diciembre y tus pupilas secas, por tu pequeña burguesía, por tus poetas publicistas, ¡por tus poetas, grandísima ciudad!, por ellos y su enfadosa categoría de descastados, por sus flojas virtudes de ocho sonetos diarios, por sus lamentos al crepúsculo y a la soledad interminable, por sus retorcimientos histéricos de prometeos sin sexo o estatuas del sollozo, por su ritmo de asnos en busca de una flauta.
Pero no es todo, ciudad de lenta vida.
Hay por ahí escondidos, asustados, acaso masturbándose, varias docenas de cobardes, niños de la teoría, de la envidia y el caos, jóvenes del "sentido práctico de la vida", ruines abandonados a sus propios orgasmos, viles niños sin forma mascullando su tedio, especulando en libros ajenos a lo nuestro.
¡A lo nuestro, ciudad, lo que nos pertenece, lo que vierte alegría y hace florecer júbilos, risas, risas de gozo de unas bocas hambrientas, hambrientas de trabajo, de trabajo y orgullo de ser al fin varones en un mundo distinto!
Así hemos visto limpias decisiones que saltan paralizando el ruido mediocre de las calles, puliendo caracteres, dando voces de alerta, de esperanza y progreso.
Son rosas o geranios, claveles o palomas, saludos de victoria y puños retadores. Son las voces, los brazos y los pies decisivos, y los rostros perfectos, y los ojos de fuego, y la táctica en vilo de quienes hoy te odian para amarte mañana cuando el alba sea alba y no chorro de insultos, y no río de fatigas, y no una puerta falsa para huir de rodillas" E. Huerta.
http://www.los-poetas.com/c/huerta1.htm | |
| | | Invitado Invitado
| Tema: Re: EFRAÍN HUERTA Sáb Abr 16, 2011 1:08 am | |
| Muchas gracias mi querida amiga, aprecio mucho el aporte que deja de Efraín Huerta haciendo aun más completa su biografía.
Un abrazo y me gustó mucho leer este escrito.
Le aprecio su tiempo, un saludo cordial.
Blanca |
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| Tema: Re: EFRAÍN HUERTA | |
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| | | | EFRAÍN HUERTA | |
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