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Hace mucho tiempo en la luna vivía un príncipe ; hombre blanco como la pureza, bello como la naturaleza y noble como el oro y el pensamiento de los niños.
Tenía como palacio una gran cueva donde guardaba sus tesoros ; pero a pesar de sus riquezas, era un hombre que vivía siempre triste.
Un día una serpiente le dijo :
" Majestad, a pesar de tener todas las cosas materiales de la vida yo lo noto que siempre está triste, por lo que le aconsejaría que se fuera de la luna y se transladara a otro planeta ; yo estoy segura que su vida cambiaría.
Yo tengo un buen amigo que se llama Superman, y él lo podría transportar a la tierra ; lugar tranquilo y acogedor donde reina la paz, la armonía entre todos los hombres ; donde no existe la envidía ni la tristeza y donde hay mucho calor humano ; allí podría encontrar a su princesa y casarse y sería el rey de la tierra."
El príncipe estuvo de acuerdo con la serpiente y entonces Superman, el hombre de acero, lo transportó a la tierra prometida.
Pero como la distancia entre la luna y la tierra era tan grande, Superman tuvo que valerse para el transporte de una bella alfombra mágica que había comprado hacía algún tiempo en uno de sus viajes a la China.
En la tierra, efectivamente, el príncipe encontró esa gran ternura y amor que sobra en este bello planeta, además de encontrarse con una bella princesa con la que se casó y tuvieron hermosos y bellos hijos.
Ahora el príncipe vive feliz con su familia en medio de la naturaleza y la abundante biodiversidad protegida por el hombre y agradeciéndole a Dios por haber hecho de la tierra un paraiso.
ssilvaro